Si hay responsabilidades patrimoniales futuras derivadas de un procedimiento judicial, la CNMV vigilará que tengan un reflejo correcto en las cuentas de BBVA y en la información financiera que el banco facilita al mercado, explican desde la CNMV.
Además, tras conocerse que el excomisario rastreó miles de llamadas telefónicas de empresarios, políticos, periodistas e incluso de los expresidentes de la CNMV Manuel Conthe y Carlos Arenillas, el supervisor bursátil revisa la seguridad de todas sus comunicaciones.
"Creemos que nuestros sistemas de seguridad están establecidos, pero cuando se conocen informaciones de este tipo, vamos a examinar nuestros sistemas actuales", añade un portavoz de la CNMV.
BBVA, por su parte, informó de que en junio de 2018 inició una investigación sobre la contratación y los servicios prestados por el Grupo Cenyt, empresa de Villarejo, y admitió que las informaciones publicadas "de ser ciertas revestirían una indudable gravedad".
Según estas informaciones el banco presidido entonces por Francisco González contrató los servicios del Grupo Cenyt entre 2010 y 2017, lo que incluyó escuchas a empresarios y miembros del Gobierno, entre otros, especialmente durante el periodo en el que la constructora Sacyr quiso tomar el control de BBVA.
Al margen de la investigación interna, el banco solicitó a un despacho externo de abogados una revisión independiente de los hechos y de la documentación disponible.
Ambas actuaciones están en curso en la actualidad, pero el grupo bancario presidido ahora por Carlos Torres Vila asegura que si en las investigaciones se acreditara la existencia de irregularidades, BBVA tomará las medidas internas que procedan y llevará a cabo las acciones judiciales pertinentes.
Como siempre, añade, colaborará con la justicia, la misma disposición que muestra la CNMV.