Gran parte de la célula terrorista a que pertenecía Salman Abedi ya está detenida. Lo ha anunciado la policía. Hablan de un progreso inmenso en la investigación. Sin embargo, todavía hay personas que siguen sin atrapar. Por ello, Reino Uido mantiene en el nivel máximo de alerta antiterrorista. Todos los hospitales británicos están prevenidos durante el fin de semana.
La policía cree que, con el material encontrado en casa del terrorista, podría haber fabricado dos bombas, y no una. También, que podría haber entregado la segunda a uno de los arrestados. De hecho, en uno de los registros se vio un robot de artificieros. Los agentes patrullan en los trenes de Manchester, las calles y el Centro Comercial donde Abedi compró la mochila que, se cree, ocultaba la bomba. Mientras, se ha producido un nuevo arresto y registros en la barbería donde acudía Salman Abedi frecuentemente.
Actualmente, ocho hombres permanecen bajo custodia policial en Reino Unido, mientras que en Libia siguen detenidos el padre y un hermano del terrorista. Según los investigadores, Abedi llamó a su hermano 15 minutos antes del ataque suicida. Todo habría hecho por venganza; por la muerte de niños sirios en los bombardeos occidentales.
Medios británicos aseguran que Abedi llamó a su madre horas antes del atentado y le pidió perdón. Las autoridades ya han dado a conocer las identidades de todas los fallecidos en esta barbarie. Siete de las víctimas, menores de edad.