Tras recoger su correspondiente camiseta, el presidente del Parlament de Cataluña, Roger Torrent, comenzaba la ascensión al pico Matagalls, en Barcelona. Una de las 18 montañas que se ha escalado para reclamar la libertad de los políticos encarcelados y los huidos.
Todas las formaciones independentistas han participado en la movilización. También el president Torra, que ha subido al Puigsacalm, en Girona. Una unidad en los gestos que no se refleja, sin embargo, en el Parlament.
Sergi Sabrià definía la pérdida de la mayoría independentista en la Cámara como "una putada", aunque no descartaba lograr recuperarla. "Esta vía se sigue abierta y, en cualquier momento, los votos se pueden recuperar y la mayoría independentista puede volver a existir", ha afirmado.
Mientras, el PDeCAT plantea, por primera vez, el autogobierno como opción en un referéndum futuro. "No descartamos que en u referéndum se pueda preguntar por el autogobierno", ha señalado le presidente del partido.
Estas declaraciones han sido hechas solo horas después de la multitudinaria manifestación por el 12 de octubre en Barcelona y que, como recuerdan en Ciudadanos, deben ser también prioridad para el Govern. "Hay que recordar al señor Torra que esas personas merecen también respeto, merecen ser escuchadas", ha afirmado Carlos Carrizosa.
Sobre la manifestación en Madrid y los abucheos sufridos por el presidente, la ministra Robles ha pedido discrepar desde el respeto: "La crítica política es bienvenida y aceptable, pero los insultos, los abucheos y las descalificaciones son una falta de respeto". Además, ha abogado porque las banderas sean un símbolo de unidad.