Las dura campaña de la Comunidad de Madrid para fomentar el uso de la mascarilla recopila la temperatura de posibles focos de infección y encrudece los escenarios hasta llegar a compararlo con un horno crematorio. "Hay cosas que dan más calor que una mascarilla", advierte.
Se trata de una iniciativa a la que ya se han sumado varias Comunidades Autónomas, como en Aragón, una de las zonas más afectadas por los brotes, donde utilizan una metáfora con una pistola para apelar a quienes salen de casa aún sospechando que podrían estar infectados. De esta forma, tal y como muestra el vídeo, los contagiados 'disparan' a otras personas que acaban en el hospital con motivo del COVID-19.
"Es cierto que son campañas eficaces, pero siempre tenemos que buscar también la empatía. Por eso, también se usan testimonios en campañas como la Baleares o la Comunidad Valenciana", afirma José Manuel Espinosa, director creativo publicitario en 'Matchpoint'.
Por su parte, el Gobierno de Canarias muestra las consecuencias que podría traer una simple reunión familiar si no se cumple con las medidas de seguridad. En el vídeo, que rápidamente se difundió por las redes por la dureza de su contenido, celebran el cumpleaños de una persona mayor que acaba abriendo un 'regalo' que es acabar ingresado en el hospital.
Se tratan de campañas de carácter emocional ideadas para tratar de frenar la propagación del virus. Lo hacen apelando a nuestros recuerdos, como en Asturias, o a nuestra responsabilidad, como en Castilla y León. En Valencia han decidido optar por incluir a un persona público y en Baleares cuentan con testimonios reales que exponen la crudeza del coronavirus. Todas son diferentes estrategias publicitarias con un mismo fin: concienciar de las graves consecuencias que puede acarrear esta la enfermedad.