La lluvia ha llegado al desfile de la Fiesta Nacional del 12 de octubre junto a los reyes y a una princesa Leonor que, por primera vez, se sitúa a la derecha de su padre para presenciarlo. Un gesto con el que se hace visible su condición de heredera y que ha permitido ver la complicidad que guarda con el rey en todo momento.
Con gran dificultad por el viento, ha aparecido el el aire la bandera de España, en un salto de más de 1.500 metros en paracaídas que fijaba las miradas al cielo y que muchos, como la infanta Elena, han querido inmortalizar con el teléfono.
Con el izado de la bandera, y tras el homenaje a los que dieron su vida por España, se ha cantado un himno de la muerte coreado por el rey, Felipe VI, la ministra de Defensa, Margarita Robles, o una tímida princesa Leonor. Y después, un desfile militar que ha querido celebrar los 30 años de la incorporación de la mujer al Ejército y que ha contado con más presencia femenina que nunca.
También una mujer, por primera vez, ha pilotado uno de los cazas de la Patrulla Águila que han dibujado la bandera de España en el cielo de Madrid. El mal tiempo ha hecho que solo ellos hayan desfilado. Las 88 aeronaves que iban a volar han tenido que volver al hangar. Pero mientras, en tierra, la lluvia ha hecho sacar paraguas y chubasqueros a muchos. No a Rivera y Casado, que han aguantado la lluvia en la tribuna.
Allí estaba, un año más, la cabra de la legión, que este año era un carnero de nombre 'Palito'. Muy aplaudidas la unidades de emergencia del Ejército, los efectivos de Protección Civil o la Guardia Civil. Un día muy deslucido por la lluvia, pero que el publico no ha querido perderse.