Dos de los nueve detenidos en la operación de la Guardia Civil contra CDR acusados de preparar acciones con explosivos han quedado en libertad tras acogerse a su derecho a no declarar en la comandancia del instituto armado en Barcelona.

Los detenidos han sido puestos en libertad con cargos, con la obligación de comparecer ante la Audiencia Nacional cuando se les cite, y se les ha mantenido la acusación de terrorismo.

Los otros siete detenidos están siendo conducidos a Madrid, donde está previsto que en las próximas horas pasen a disposición del juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón, que investiga el caso.

En el marco de la operación, la Guardia Civil ha practicado en total nueve detenciones y diez registros domiciliarios en los municipios de Mollet del Vallès, Sant Fost de Campsentelles, Cerdanyola del Vallès, Sant Vicenç de Torrelló, Sabadell y Santa Perpètua de la Mogoda.

La Fiscalía sostiene que los miembros de los CDR detenidos —que están acusados de los delitos de rebelión, terrorismo y tenencia de explosivos— tenían en su poder gran cantidad de precursores de explosivos y planeaban utilizarlos en fechas próximas con motivo del aniversario del 1-O y la sentencia del juicio del 'procés'.

Agentes de la Guardia Civil durante el registro de un domicilio en Sabadell en una operación contra los CDR