Arretxe, que era miembro de la organización juvenil Segi, fue condenado en octubre de 2011 por un delito de integración en banda terrorista.
La pena fue ratificada por el Tribunal Supremo en 2013 e ingresó en prisión en abril de ese mismo año, tras ser detenido por la Ertzaintza durante la acampada de protesta organizada en el Boulevard de San Sebastián.
Finalmente, este lunes por la mañana ha abandonado el centro penitenciario de Soria, donde a su salida ha sido recibido por familiares y amigos.