La exjefa de logística militar de ETA Itziar Plaza, presa en la cárcel de Estremera, en Madrid, y que había sido condenada en Francia a sendas penas de 12 años y 18 meses de prisión, que fueron fusionadas, ha sido puesta en libertad provisional, según ha informado la Asociación de familiares de presos de ETA, Etxerat.
La mujer, nacida en Bilbao el 13 de octubre de 1982 y que estaba considerada una de las jefas de la banda, fue detenida en julio de 2009 en la localidad francesa de Pau por la Policía gala en colaboración con la española. Plaza fue arrestada junto a Asier Borrero e Iurgi Garitagoitia cuando salían del McDonald's y se dirigían al coche que habían aparcado un rato antes en las inmediaciones, un vehículo robado con las matrículas dobladas.
Según el Ministerio del Interior, la activista de ETA tenía un puesto destacado en la cúpula de ETA, después de que fueran detenidos desde noviembre de 2008 los tres jefes sucesivos del aparato militar: Garaikotz Aspiazu, 'Txeroki', Aitzol Iriondo y Jurdan Martitegi.
El Tribunal de lo Criminal de París condenó en marzo de 2013 a Itziar Plaza a 12 años de cárcel. En mayo de 2015 se le impuso, también en Francia, otra pena de 18 meses de cárcel por haber utilizado un coche robado y diversos documentos y material también sustraídos por la banda, que fueron encontrados en el interior del vehículo tras sufrir un accidente en septiembre de 2007.
El Tribunal Correccional de París considera a Plaza Fernández culpable de los cinco cargos de receptación, uso de bienes robados, a sabiendas de su origen ilícito, por los que estaba inculpada y le impuso también la expulsión definitiva de Francia al término de su condena. Además, acordó la fusión de los 18 meses con los 12 años de prisión dictados en su contra en un anterior juicio en 2013, de forma que, en términos de cumplimiento, la que contaba era la segunda pena.
Itziar Plaza abandonó este pasado miércoles 19 de diciembre la prisión de Estremera. Primero estuvo en las cárceles francesas de Fleury y Reau. Tras finalizar la pena impuesta en el Estado francés, en agosto de 2018, fue extraditada a España. La Audiencia Nacional resolvió su ingreso en Soto del Real y a mediados de octubre fue trasladada a Estremera.