Con la desescalada en marcha, el reto principal al que nos enfrentamos es evitar la propagación del coronavirus. Por eso, máquinas parecidas a las que se utilizan en los aviones para filtrar el aire podrían ser claves a la hora de volver a la actividad diaria.
Tal y como explica Sergio López, fundador de Bio Air Socety, este tipo de aparatos usa tecnología ultravioleta para eliminar todo tipo de virus, bacterias, alérgenos y compuestos orgánicos volátiles. Filtros que son parecidos a los que se usan en los aviones y que tienen una alta eficiencia.
Con estos aparatos se puede general aire limpio, libre de cualquier patógeno y, pensados para colegios, bares, oficinas, tienen una alta capacidad para eliminar microorganismos gracias a su continua producción de aire limpio.
Su aplicación podría extenderse además a cualquier medio de transporte, ya sea aéreo, marítimo o terrestre.
Así son los filtros de los aviones
Los filtros HEPA que hay en los aviones son capaces de capturar hasta el 99,99% de cualquier patógeno, incluyendo el coronavirus.
El aire entra por el motor, frío, y se calienta al entrar en contacto con la maquinaria. Una vez dentro se enfría y entra en la cabina mezclándose con el que hay en el interior.
Este aire nunca se estanca dentro y esa mezcla circula por todo el avión. En la parte trasera se desecha un 50% de ese aire, y el restante pasa por unos filtros HEPA que limpian el aire y lo vuelven a poner en circulación.
"Recirculamos cada dos o tres minutos. Es una tasa de renovación muy superior a la que se exige en otros ambientes, y significa ocho veces más de lo necesario", explica Jesús Elices, piloto de Iberia:
En un futuro próximo esta tecnología también podría cambiar los aires acondicionados de nuestros coches, y de hecho los fabricantes ya trabajan en ello.
En Tesla cuentan con un modelo que podría deshacerse del 99,7% de gases contaminantes, bacterias y virus. Estos nuevos sistemas de ventilación podrían ser claves en todo tipo de espacios y evitarían la propagación del coronavirus.