Su origen es reciente, pero ya están en el foco de atención. Se hacen llamar GAAR, los Grupos Autónomos para Acciones Rápidas, y quieren paralizar Cataluña. Están organizando grupos muy repartidos por todo el territorio para provocar que los Mossos d'Esquadra tengan que desplazarse, y así debilitar los puntos con más necesidad de protección.

Los GAAR solo se comunican por Telegram para impedir ser identificados, y piden formar grupos con gente de una misma población que conozcan el terreno y las infraestructuras cercanas. Y lo más importante, que aporten ideas para llevar a cabo esas acciones. Aseguran que sus actuaciones no serán violentas, pero sí apelan al boicot en infraestructuras eléctricas, aeropuertos, estaciones de tren y múltiples carreteras.

Antonio García Ferreras y Carlos Quílez

A pesar de estos anuncios, los expertos dicen que los GAAR son ruido y que realmente hay que prestar más atención a la rama antisistema de los CDR. "Es más ruido que una amenaza tangible, no así ese grupo de antisistema que, bajo el paraguas de los CDR, pueden actuar y pueden hacer lo que vayan hacer", ha explicado el periodista Carlos Quílez en declaraciones a Al Rojo Vivo.

Pero es muy importante no bajar la guardia. "La vigilancia previa es muy importante. No solo ese día, sino desde hoy", ha apuntado Txutxi Castelo, presidente del Sindicato Euspel Ertzaintza. Por su parte, el president del Parlament, Roger Torrent, ha llamado a la vía no violenta. "La República no se construye con pasamontañas ni encapuchados". La ANC, Omnium y los CDR reniegan de este grupo y piden que se sigan sus canales de comunicación para asistir a la movilizaciones.