La formación política Más Madrid ha forzado la dimisión del concejal Pablo Soto tras ser acusado de acoso sexual. Según la dirección del partido, el grupo municipal conoció una información sobre un posible caso de acoso que afectaba a un cargo público del grupo municipal y a una militante de la organización.
Según Más Madrid, tras darse a conocer este episodio, el partido puso en marcha "inmediatamente" un protocolo antiacoso encargado a una experta, cuyo informe tras analizar el caso confirmó "los hechos y su gravedad", según fuentes del partido. Esto llevó a la dirección del grupo municipal a pedir "la dimisión inmediata" de Soto.
La formación madrileña ha explicado que el "concejal accedió y prometió presentar la renuncia", pero que, "en lugar de cumplir con su palabra, hizo público un comunicado con su versión de los hechos que no concuerda con la versión de la víctima", a la que la dirección "concede absoluta veracidad". Este hecho ha llevado a la dirección a exigir su "dimisión inmediata".
Además, según ha continuado Más Madrid en su comunicado, desde que el partido fue conocedor de estos hechos "ha estado en contacto con la víctima y los testigos" con intención de "preservar su intimidad y garantizar la protección de sus derechos mientras se sustanciaba el proceso de asunción de responsabilidades políticas".
La versión de Pablo Soto
En sus redes sociales, el hasta ahora edil de Más Madrid ha explicado que días atrás la formación le señaló porque "una persona se había sentido acosada" por él. En un comunicado, Soto ha afirmado a través de su cuenta de Twitter: "Sólo podía decir que era imposible. ¿Quién, cuándo, dónde, por qué? Durante unas horas no tuve más información y no paré de repasar lo que había hecho día a día, hora a hora".
En este sentido, cuando le explicaron con más detalles los hechos, Soto entendió, según ha continuado, que se había producido una situación de la que dice no haber sido consciente. Le relataron que unas semanas atrás, cuando estaba tomando unas cervezas tras el trabajo, le pidió a una persona de su entorno laboral, que no logra identificar, que le ayudara a ir al cuarto de baño. Pablo Soto tiene una minusvalía que le hace ir en silla de ruedas y que requiere de la ayuda de otras personas para determinadas tareas.
"Si no puedo hacerlo solo (ir al baño), normalmente se lo pido a alguien de máxima confianza. Y si no, sencillamente, me aguanto", ha descrito. Sin embargo, no recuerda haber pedido ayuda para esa situación ese día.
"Según me contaron, algo le dije a esa persona mientras estábamos en el baño. Todavía no sé exactamente qué, que tenía tono o significado sexual", ha continuado. "Sé que puedo ser un bocaclanca y que a veces he hecho bromas sexuales a mi familia y a mis amigos cercanos. Sin embargo, no recuerdo ese episodio", ha terminado el texto.