El ministro de Estado de Derechos Humanos y Relaciones con el Parlamento, Mustafá Ramid, ha asegurado que España "sabía que el precio por subestimar a Marruecos es muy alto" y ha señalado que el país no ha cumplido con "la buena vecindad" al "acoger" al secretario general del Frente Polisario, Brahim Ghali.
"La recepción por parte de España del líder de las milicias separatistas del Polisario, bajo una identidad falsa, sin tener en cuenta las relaciones de buena vecindad que requieren coordinación y consulta, o al menos cuidando de informar a Marruecos, es un acto irresponsable y totalmente inaceptable", ha escrito Ramid en su perfil de Facebook.
La llegada a España de este líder ha sido el detonante de la llegada masiva de migrantes a la ciudad de Ceuta, ya que el Gobierno marroquí avisó hace una semana de que la acogida de Ghali en España por razones humanitarias podría tener consecuencias.
"¿Qué esperaba España de Marruecos al acoger al líder de una banda que se levantó en armas contra ella?", ha cuestionado el ministro marroquí, para preguntar también "qué habría perdido España si hubiera consultado a Marruecos sobre la acogida de este individuo" y "por qué España no anunció la presencia en su suelo del individuo en cuestión con su verdadera identidad".
Asimismo, ha indicado que no haber informado al Gobierno marroquí de la llegada de Ghali podría ser "una prueba de su conciencia (de España) de que el acto cometido es contrario a las buenas relaciones de vecindad". "¿Y si fuese Marruecos quién cometiese este acto?", ha agregado.
Ramid ha lamentado que España haya "preferido" su "relación con el Polisario y su mentor, Argelia", a su relación con Marruecos, que, como ha expresado el ministro, "ha sacrificado mucho en nombre de la buena vecindad", la cual "debería ser objeto de especial atención por parte de los dos vecinos".
Laya asegura que la acogida del polisario no fue una "agresión"
La ministra de Exteriores, Arancha González Laya, ha asegurado en una entrevista en RNE que el objetivo del Gobierno español es "reconducir la situación" porque la asistencia al general del Frente Polisario "fue un gesto humanitario hacia una persona que estaba gravemente enferma".
"A esta respuesta nunca le dimos un carácter de agresión y no vamos a entrar en una escalada, pero vamos a ser firmes en la defensa de nuestras fronteras, la seguridad y el orden", ha advertido.
Laya asegura que se han dado explicaciones sobre la acogida del polisario "múltiples veces" a Rabat y que nunca se hizo "buscando una agresión a nadie". "España siempre ha sido exquisitamente prudente en su postura sobre el Sahara, y así lo seguirá siendo, España siempre se ha mantenido anclada en la necesidad de una solución política", ha dicho.
La ministra asegura que "España tiene un compromiso con Brahim Ghali" que es "darle una asistencia humanitaria para su recuperación" y ha avisado de que si tiene "cuestiones pendientes con la justicia española, debería comparecer como cualquiera".
Desde la Comisión Europea, su vicepresidente, Margaritis Schinas, ha informado que este martes habló con Laya y con el ministro del Interior, Grande-Marlaska, "y les he asegurado que haremos todo lo que España necesite para ayudar a la gestión de la frontera en Ceuta y Melilla, son fronteras externas de la Unión Europea, tenemos medios y recursos, guardacostas europeos, frontex, ayudaremos como podamos y según las demandas de Madrid".