En el corazón de Madrid, en el barrio de Lavaipés y Embajadores, el mapa electoral del pasado domingo mostró una sorprendente distribución de votos. Mientras la mayoría de la zona estaba teñida de rojo, indicando una clara victoria del PSOE, un pequeño recuadro destacó por su color inesperado: allí, Junts apareció como la primera fuerza. ¿Un error?
Durante la noche electoral, los simpatizantes de Junts celebraron con entusiasmo, probablemente por resultados como el de Lavapiés, donde obtuvieron el 35% de los votos, situándose como la fuerza más votada. Este fenómeno no se limitó a Madrid; en Zaragoza, otra área predominante socialistas, Junts apareció con un 41% de los votos, mientras el PSOE desaparecía de la escena.
La situación fue similar en Las Palmas de Gran Canaria, donde Junts ganó con casi el 26%, desplazando a Coalición Canaria. Marbella también registró un resultado inusitado: Junts superó al PSOE en una zona donde tradicionalmente los socialistas tienen una fuerte presencia.
Estos resultados sorprendentes podrían ser posibles, ya que las elecciones eran europeas, permitiendo a los ciudadanos votar por cualquier partido. Sin embargo, todo apunta a que podría tratarse de un error en el recuento o en la transmisión de los datos electorales.
El presunto error podría haberse producido durante el conteo de las papeleras, en la retransmisión de esos resultados a través de dispositivos móviles, o incluso en los sistemas de la empresa encargada del procesamiento de los datos.
Por ahora, Junts no podrá celebrar estas victorias de manera definitiva. Los resultados actuales son provisionales y el viernes se conocerán los definitivos. Lo más probable es que estas anomalías turquesas desaparecía del mapa electoral, restaurando los colores tradiciones de cada región.