Las ministras y ministros del nuevo Gobierno de Pedro Sánchez han prometido en la mañana de este martes sus cargos para arrancar por fin la legislatura de la renovada coalición. Lo han hecho, como marca el protocolo y viene siendo habitual en este tipo de eventos, en el Palacio de la Zarzuela ante el rey Felipe VI, la presidenta del Congreso, Francina Armengol, y el propio líder del Ejecutivo, entre otros. El acto ha tenido lugar en una sala sin símbolos religiosos; solo, una mesa y la Constitución.
La toma de posesión ha arrancado con la lectura de los reales decretos incluidos ya, desde este martes, en el Boletín Oficial del Estado que notifican la llegada al Gobierno de las 22 ministras y ministros que acompañarán a Sánchez en esta nueva legislatura. Acto seguido, se ha procedido a la promesa del cargo, donde se han dado varias situaciones a destacar: la primera, que todos los titulares del Gobierno han prometido su cargo, y no jurado, fórmula recurrida en anteriores presentaciones de gobiernos.
En este sentido, cabe destacar que casi todos ellos han mencionado las palabras "ministros y ministras" a la hora de prometer el cargo, salvo Félix Bolaños, Margarita Robles , José Manuel Albares, Luis Planas y Pablo Bustinduy; como curiosidades, la ministra de Igualdad, Ana Redondo, ha expresado: "Ministros y ministras, por supuesto"; Sira Rego ha invertido el orden y ha dicho "ministras y ministros", e Isabel Rodríguez se ha corregido al final para añadir "ministras" en su promesa.
También ha llamado la atención que ni Rego ni José Luis Escrivá han puesto la mano en la Constitución a la hora de intervenir y, en un plano más informal, que Nadia Calviño, tras prometer su cargo y mirar el rey, no sabía muy bien dónde tenía que ponerse, quizá despistada por el cambio de posición de Bolaños, y que Mónica García ha trastabillado un tanto en su promesa. Tras la promesa de cada uno de las ministras y ministros, Felipe VI les ha felicitado a todos, dándoles la enhorabuena, y se han realizado la foto de familia tradicional.