En plena crisis de la formación morada, Ramón Espinar, el líder regional de Podemos en Madrid, ha presentado su dimisión. "No se dan las condiciones para llevar el proyecto de Podemos en Madrid hacia donde creo que debe dirigirse", ha apuntado Espinar en una carta publicada en redes sociales.
Hay quien interpreta la salida de Espinar como un malestar con la dirección de Pablo Iglesias. "Ahora, a lo mejor, tenemos que escuchar que Ramón Espinar es otro conspirador más", ha valorado Carolina Bescansa en Al Rojo Vivo. Con la dimisión de Espinar, se han dado reacciones inmediatas.
"Estoy sorprendida porque me acabo de enterar en este mismo momento. Lo lamento porque es un compañero", ha apuntado Calra Serra, portavoz de Podemos en la Asamblea de Madrid, en declaraciones a Espejo Público. Además, la dimisión de Espinar trastoca los planes de la cúpula de Podemos.
"Esto es un golpe político para Pablo Iglesias en concreto porque Ramón Espinar es uno de los secretarios generales territoriales más cercanos al líder de Podemos", ha apuntado el periodista José Enrique Monrosi. Por su parte, el cofundador de la formación morada Juan Carlos Monedero carga la responsabilidad de cualquier ruptura sobre los hombros de Íñigo Errejón.
"Ningún interés personal debería primar. La división nos agota", ha expresado Monedero a través de su cuenta personal de Twitter. Precisamente, preocupados por la división se ha celebrado una reunión de líderes regionales de Podemos; un encuentro no convocado por la dirección del que sale un mensaje: unidad.
"Nuestro mensaje es muy claro, tenemos que estar unidos", ha destacado José García Molina, secretario general de Podemos en Castilla-La Mancha. Evitan así lanzar reproches a Íñigo Errejón tras la nueva grieta en Podemos que pilla a Pablo Iglesias de baja por paternidad.