Cada semana, la Generalitat informa a Hacienda de sus gastos y hasta el momento no han invertido ni un euro público en la consulta del 1 de octubre. De ahí, deduce el ministro Montoro que no habrá referéndum.
Si la Generalitat se gasta el dinero público, una comisión de expertos viajará a Cataluña y se sentará ahí para controlar cada céntimo de los presupuestos catalanes.
Cristóbal Montoro también ha dicho que la situación económica de Cataluña es muy complicada y que están sobreviviendo gracias a la liquidez que les llega del Gobierno central. Estos comentarios no han gustado nada a los independentistas catalanes.