Los móviles del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la ministra de Defensa, Margarita Robles, han sido infectados por el sistema Pegasus y se han producido incursiones en sus comunicaciones. Así lo ha anunciado el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, que ha señalado que han puesto en conocimiento de la Justicia esta infiltración en los sistemas de comunicación del Gobierno.
El Ejecutivo, que ha convocado de manera urgente a la prensa para dar cuenta de la información, ha trasladado dos informes técnicos del Centro Criptológico Nacional que han constatado el espionaje al presidente del Gobierno y que se ha producido, según Bolaños, de manera "externa". "En una democracia como la nuestra todas las intervenciones se producen por organismos judiciales y con autoridad judicial. (...) No tenemos ninguna duda de que es una intervención externa", ha aseverado.
Según ha detallado el Gobierno, el hallazgo se ha producido en el curso de las investigaciones que está realizando el CNI en relación con el presunto espionaje a los líderes independentistas catalanes. La denuncia se ha presentado ante la Audiencia Nacional.
En mayo y junio de 2021
Las dos incursiones en el terminal de Sánchez se habrían producido en mayo de 2021, mientras que el móvil de Robles habría sido intervenido en una ocasión en junio de 2021. Bolaños ha detallado que no se han hallado evidencias de intrusiones posteriores y que se van a verificar los terminales de todos los ministros para comprobar si ha habido más infecciones de este sistema.
El Ejecutivo ya sospechaba que el teléfono del presidente podría haberse visto señalado por el sistema espía y es por eso que se llevó a analizar a finales de la semana pasada. La confirmación ha llegado este mismo fin de semana, según apuntan fuentes de Presidencia del Gobierno.
La infección con este programa tendría que haberse producido de dos maneras: o pirateándolo de manera física o con un simple mensaje de texto, un mail o SMS, que haga que el virus se adentre en el sistema. Una vez el sistema está corrompido, se puede acceder a los WhatsApp, SMS, agenda, fotografías y todo tipo de aplicaciones. Incluso se puede activar la grabadora o la cámara del terminal.
Más de 2GB de información
Bolaños ha anunciado que se van a reforzar los protocolos de seguridad y que el Gobierno está actuando "con todas las capacidades que dispone para esclarecer los hechos". Sobre la clase de datos que se habrían recabado con el sistema, desde Moncloa han asegurado que desconocen qué clase de información se ha obtenido, aunque los informes cifran el volumen. En concreto, de acuerdo con fuentes del Ejecutivo, en la primera incursión se habrían descargado 2,6 gigabytes de información, mientras que en la segunda habrían sido 130 megabytes, informa Esther Redondo. La intervención al teléfono de Robles habría supuesto una descarga de 9 MB.
El hallazgo se produce después de que el espionaje a los líderes independentistas con este mismo sistema haya provocado una crisis entre el Ejecutivo y sus socios preferentes. Entre los políticos catalanes espiados se encontrarían los antiguos presidentes de la Generalitat e incluso el actual titular, Pere Aragonès.
La relación se ha enrarecido tanto que los republicanos votaron en contra del decreto del Ejecutivo para dar respuesta a la guerra de Ucrania, a pesar de que en un primer momento hablaron de que con "las cosas de comer" no podían jugar. Aragonès llegó a reclamar la dimisión de Robles, como responsable del CNI, uno de los organismos que habría adquirido Pegasus y del que se sospechaba que habría investigado a los independentistas.
Si bien en la última sesión de control Sánchez intentó tender puentes con los republicanos, la ministra de Defensa fue especialmente dura ante las críticas por el espionaje. Incluso llegó a añadir, una declaración que hoy parece profética, que "cuando salga todo algunos a lo mejor tendrán que callarse".
Preguntado sobre si esta incursión ha tenido que ver con la situación política en Cataluña, Bolaños ha descartado hacer cábalas. "No creo que sea el momento de conjeturas", ha respondido, insistiendo en que el Ejecutivo aporta "información contrastada". "Si tiene relación con otros hechos, esperemos que el tiempo no lo explique", ha zanjado el titular de Presidencia.
Feijóo habla de "casualidad política no menor"
Alberto Núñez Feijóo se ha referido a la noticia como una "casualidad política no menor", puesto que el Gobierno ha informado de este espionaje en "pleno debate" sobre el espionaje a los líderes independentistas.
El nuevo líder del PP ha admitido que les ha "sorprendido" que el Gobierno interrumpiera este lunes su agenda para explicar que Sánchez y Robles también han podido ser "víctimas de escuchas con el programa Pegasus". "Es la primera explicación que el Gobierno nos da después de 15 días en los que se esté debatiendo y comentando este asunto".
Con todo, ha subrayado el Ejecutivo cuenta con el apoyo "inequívoco" de los 'populares' para "preservar la seguridad del Estado y de todas las instituciones".
UP exige responsabilidades
Por su parte, la líder de Podemos y ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, ha cuestionado el "gravísimo fallo de seguridad de nuestro Estado", que es "inadmisible" en democracia y que exige "responsabilidades políticas". "Es la única manera de que se restablezca la confianza de la ciudadanía en la democracia, y es una cuestión de calidad democrática básica", ha declarado la secretaria general de los morados.
Su compañera de Consejo de Ministros, la titular de Igualdad Irene Montero, ha señalado que la democracia "no puede tolerar" que se espíe a sus representantes públicos. "Es un ataque a la seguridad del Estado. Los responsables políticos no pueden quedar impunes", ha deplorado.