El exalcalde de Marbella (Málaga), sucesor de Jesús Gil y condenado por el 'caso Malaya', Julián Muñoz, ha muerto este martes a los 76 años a causa del cáncer de pulmón que sufría. Muñoz se encontraba ingresado desde el pasado domingo, 15 de septiembre, en el hospital HC de esta localidad malagueña, centro al que acudió de urgencia y donde estaba recibiendo tratamiento, según confirmó su mujer, Mayte Zaldívar.
La vida pública y mediática del que fuera el alcalde más fugaz de la historia de Marbella comenzó en el año 2002. Su mandato duró tan sólo un año y tres meses, pero su noviazgo con la cantante Isabel Pantoja, su separación televisada de su mujer, Mayte Zaldívar, y su enemistad pública y mediática con su predecesor y mentor, el desaparecido empresario y político Jesús Gil y Gil, hizo que fuera uno de los personajes más populares de la década de los 2000, ocupando horas y páginas de los medios de la prensa del corazón. Pero también las ocupó en información política: los cuatro nombres que aparecen en estas pocas líneas fueron condenados por el que se considera el mayor caso de corrupción inmobiliaria de España hasta la fecha: el 'caso Malaya'.
Más de 20 años después de todo aquello, su paso por la prisión y un centro de inserción social (en el que cumplió por enfermedad el tercer grado), Julián Muñoz ha fallecido a consecuencia de un cáncer que él mismo denominó "galopante".
Julián Muñoz, mano derecha de Gil y alcalde de Marbella
Julián Felipe Muñoz Palomo nació en El Arenal (Ávila) en 1947 y con 27 años se casó con Maite Zaldívar, con la que tuvo dos hijas. Camarero de profesión, se mudó a Marbella y allí comenzó a coquetear con la política, entrando de lleno en ella de la mano del entonces todopoderoso Jesús Gil. Con el paso del tiempo, se convertiría en una de sus personas de confianza para todo, como también lo fue el empresario Juan Antonio Roca, cerebro de la trama de 'Malaya'.
Desde 1991, Muñoz fue concejal del Ayuntamiento de Marbella con el Grupo Independiente Liberal (GIL), el partido que fundó Gil, hasta que en mayo de 2002 tomó posesión como alcalde de la ciudad andaluza sucediendo a Gil, que tuvo que dimitir por el 'caso Camisetas'.
Pocos meses después, comenzaría entre los dos una cruzada de reproches y recriminaciones que las páginas políticas -y sobre todo del corazón- recogerían al detalle: "Es el mayor traidor de todos los que me han traicionado", le dijo Gil, tal y como podemos ver en el vídeo de esta noticia que recoge los momentos claves y mediáticos de la figura del ya desaparecido Julián Muñoz. "Si quiere guerra, iré a la guerra, pero antes me lo llevo por delante", le contestaba.
En 2003, Muñoz obtuvo mayoría absoluta en las elecciones municipales, revalidando así su puesto de alcalde de Marbella, pero tres meses después fue expulsado del Ayuntamiento tras una moción de censura orquestada por un grupo de tránsfugas de su propio partido, tres ediles del PSOE y otros tres del Partido Andalucista. Marisol Yagüe, del GIL, fue elegida la nueva alcaldesa de Marbella.
Su declive político y su etapa junto a Isabel Pantoja
También en ese 2003 y mucho antes de abandonar la alcaldía marbellí, Muñoz comenzó una relación sentimental con la tonadillera Isabel Pantoja, rompiendo su matrimonio de 30 años. Salir con 'la Pantoja' no era simplemente estar con una artista famosa; la cantante era por entonces probablemente la persona perseguida por la prensa del corazón. La relación de Muñoz y Pantoja se convirtió en omnipresente en los platós de entretenimiento, ocupando este particular triángulo sentimental horas y horas de tertulia y debates televisivos del corazón. Apodado como 'Cachuli', Julián Muñoz se ganó un hueco más que importante en esa prensa rosa por ser nada más y nada menos que el novio de 'la Pantoja'.
Un nuevo rostro ocuparía también un sillón en esos corrillos: la mismísima Mayte Zaldívar, que contó con pelos y señales todos los entresijos de esos supuestos y sonados "cuernos". El hoy principal plató de esta casa fue el emblemático estudio de 'Dónde estás corazón', de Antena 3, uno de los grandes testigos de excepción de todo lo que aconteció entonces.
Pero el triángulo no se quedó únicamente en asuntos del corazón, sino que los tres nombres fueron condenados por diferentes delitos cometidos en el marco de la operación del 'caso Malaya'.
Condenado a prisión en el caso Malaya
Isabel Pantoja fue condenada a dos años de cárcel por blanqueo de capitales de su pareja Julián Muñoz y a pagar una multa de más de un millón de euros. A Zaldívar le cayeron dos años y medio y Julián Muñoz se llevó de los tres la mayor y peor parte: fue condenado a un máximo de 20 años de prisión por diferentes delitos cometidos durante su estancia en el Ayuntamiento de Marbella.
Su relación con Pantoja tocó fin en 2009, cuando Muñoz ya estaba en la cárcel, entonces en régimen de prisión provisional. Desde entonces y para siempre quedarían ya en la memoria de todos momentos inolvidables de aquella particular pareja, como el 'dientes, dientes, que es lo que les jode', o la mítica imagen en el coche de caballos de aquel Rocío de 2003 en el que ambos aparecían por primera vez, juntos y abrazados, presentando su noviazgo ante las cámaras de televisión.
Julián Muñoz tuvo un paso intermitente por la cárcel. Primero por las diferentes condenas y juicios a los que tuvo que hacer frente y después por su delicado estado de salud. En 2016, abandonó la cárcel de Alhaurín de la Torre (Málaga), donde había estado durante dos periodos, para seguir su penitencia en régimen de tercer grado en el Centro de Inserción Social (CIS) de Algeciras (Cádiz). Desde 2021, y por cuestiones de salud, cumplió este tercer grado en su casa de Marbella.
La relación con Zaldívar fue reconstruyéndose con el paso de los años, con el nacimiento de sus nietos y con el empeoramiento de su salud. Tanto es así que Zaldívar ha estado con él, junto con sus hijas, arropándolo y apoyándolo en sus últimos días de vida. Poco antes de su muerte, su familia familia admitió que la situación del exalcalde era "grave e irreversible". La reconstrucción de la relación se materializó al casarse de nuevo a principios de 2024, 17 años después de divorciarse.
Julián Muñoz dijo arrepentirse del daño causado a Zaldívar y a sus dos hijas pero, si Isabel Pantoja no se hubiera cruzado en su camino, muy probablemente estas líneas no se hubiesen escrito y Muñoz hubiera pasado a la historia, mediáticamente hablando, como el sucesor de Gil en la alcaldía de Marbella (y todo lo que aquello conllevó), y no como uno de los personajes con más tirón de la prensa del corazón en España.