Desestabilizar Europa
Musk analizó cómo desbancar a Starmer del Gobierno británico antes de las próximas elecciones, según 'Financial Times'
¿Cuál es su estrategia? El multimillonario ha estado sopesando cómo él y sus aliados pueden desestabilizar al Gobierno laborista y ha buscado información sobre cómo generar apoyo para movimientos políticos británicos alternativos.
El multimillonario Elon Musk mantuvo conversaciones privadas con sus aliados sobre la posibilidad de destituir al primer ministro británico, Keir Starmer, de su cargo antes de las próximas elecciones generales, según ha informado este jueves Financial Times.
Musk, la persona más rica del mundo y un aliado cercano del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, respaldó el mes pasado a un partido alemán ultraderechista y antiinmigración antes de las elecciones programadas para febrero. Además, ha comentado repetidamente sobre la política británica, exigiendo la dimisión del primer ministro Starmer.
Musk ha estado sopesando cómo él y sus aliados pueden desestabilizar al Gobierno laborista y ha buscado información sobre cómo generar apoyo para movimientos políticos británicos alternativos para forzar un cambio de gobierno, según el informe del mencionado medio, que cita a fuentes conocedoras de esta estrategia. En él, además, detallan que en particular ha puesto interés en el partido populista de derechas Reform UK.
"Su opinión es que la propia civilización occidental está amenazada", ha señalado una de las fuentes al periódico británico. El también dueño de X no ha respondido a las preguntas de Reuters sobre esta información.
Musk había acusado anteriormente a Starmer de lo que dijo fue un fracaso a la hora de procesar a los hombres que violaron a niñas cuando era director de la Fiscalía Pública entre 2008 y 2013. Starmer posteriormente defendió su trabajo como fiscal principal de Reino Unido.
Por otra parte, el empresario tiene previsto recibir a la líder del partido Alternativa para Alemania, Alice Weidel, en una entrevista en directo en X este mismo jueves. El partido alemán respaldado por él ha sido etiquetado como de extrema derecha por los servicios de seguridad alemanes.
A principios de esta semana, el primer ministro noruego, Jonas Gahr Stoere, había expresado su preocupación por la implicación del dueño de Tesla en cuestiones políticas de países fuera de los Estados Unidos. En la misma línea, hablaron después el presidente de Francia, Emmanuel Macron, el propio Starmer y el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez.