El plazo que da el PSOE a sus socios de coalición para llegar a un acuerdo para lareforma de la ley del 'solo sí es sí'va camino de agotarse. El martes, como tarde, deberían presentar la proposición de ley para que continúe los tramites en el Congreso de los Diputados. Desde el PSOE advierten que de no cerrar una propuesta conjunta para entonces lo harán en solitario, aunque confían en que habrá "unanimidad" para realizar las "mejoras técnicas que hagan falta" para la ley de Violencia Sexual. También Unidas Podemos quiere que haya "una respuesta unitaria como Gobierno ante esta ofensiva contra le ley".
Si ambas partes parecen motivadas a poner de su parte para que se produzca ese acuerdo, desde el PSOE creen que Podemos está "desenfocando el debate" con la postura que la ministra de Igualdad Irene Montero está manteniendo en los actos de Podemos de este fin de semana—como el de "¿Consentiste o no? Solo sí es sí", celebrado el domingo—. Los socialistas instan a Unidas Podemos a dejar de poner el foco en el consentimiento: "El Gobierno nunca ha valorado tocar el consentimiento en la ley, de hecho es el alma de la ley", ha manifestado la ministra portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, en una entrevista este domingo en 'Público'.
Y es que Irene Montero asegura, y repite durante todo el fin de semana, que su única línea roja para la reforma de la ley es el consentimiento sexual, porque aunque no haya resistencia por parte de las víctimas, sin consentimiento "también hay violencia".
Así, la responsable de Igualdad se ha mostrado dispuesta a "ceder" y "aceptar las condiciones del socio mayoritario", pero asegura que las discrepancias con el ala socialista del Ejecutivo en este contexto "son fuertes". Considera que todas las propuestas que les han hecho tocan la esencia de la norma, el consentimiento: "Nadie ha sido capaz de hacer una propuesta concreta de modificación que no signifique volver al modelo anterior. Todo el mundo dice que la ley ha tenido un agujero, pero nadie sabe decir cuál es ese agujero y hacer una propuesta para taparlo", ha denunciado en el acto de este domingo.
No obstante, y cuando ya haymás de 400 agresores sexuales condenados beneficiadospor las rebajas de penas, Montero confirma que está dispuesta a aumentar algunas penas por delitos sexuales "si es necesario". También, a pesar de que "cederá", sigue manteniendo que la ley "está bien hecha" y que son una minoría de jueces los que están aplicando mal la norma. "Nunca ha estado más dispuesta a llegar a un acuerdo porque yo sé que la ley está bien hecha".
Fuentes de la parte socialista del Gobierno a laSexta, en cambio, insisten en que el problema no es el consentimiento y que este no se verá afectado con la reforma de la ley. "El problema no es el consentimiento, se está desenfocándote el debate. El problema es la bajada de penas, que es gravísima", reafirman las mismas fuentes. Esta cuestión "hay que resolverla sí o sí", ha manifestado la ministra Nadia Calviño en una entrevista en 'El Correo'. "Si se hacen las reformas técnicas acertadas podemos evitar que se sigan produciendo revisiones de pena", ha indicado Isabel Rodríguez en 'Público', asumiendo que "hay que hacerse cargo del dolor de las víctimas y de la preocupación social".
El pasado viernes, sobre el mediodía, el ministerio de Justicia envió a Igualdad su última propuesta para la proposición de ley, y hasta ahora siguen a la espera de su respuesta para avanzar en la negociación.