Trabajar menos por el mismo dinero
Las otras victorias más allá de la nueva jornada laboral: registro horario, desconexión digital y más sueldo para trabajadores a tiempo parcial
¿Qué pasa ahora? El Congreso de los Diputados tiene que apoyar las medidas anunciadas por el Gobierno tras el Consejo de Ministros. Una vez obtenidos los apoyos suficientes, entrarían en vigor una vez sean publicadas en el Boletín Oficial del Estado.
La entrada en vigor de la nueva jornada laboral, que contempla una reducción de 40 a 37,5 horas semanales, parece hoy más cerca después de su aprobación en el Consejo de Ministros tras el acuerdo alcanzado por el Ministerio de Trabajo, dirigido por Yolanda Díaz, con los agentes sindicales (CCOO y UGT).
No obstante, este punto no ha sido el único que ha anunciado la ministra en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. Además de la reducción de la jornada laboral, se aumentará el sueldo a las personas que trabajen a tiempo parcial, se reforma el registro horario de la jornada laboral y se reconoce el derecho a la desconexión digital.
En el caso del registro horario, que hasta ahora no había sido muy eficaz, a partir de ahora será digital y no manipulable. Al mismo tiempo, se endurecen las sanciones para las empresas que no lleven este registro de la jornada de sus empleados. El registro tendrá los mismos requisitos para los empleados a tiempo parcial, obligando a los trabajadores a fichar en primera persona, al inicio y al final de la jornada, registrando todas aquellas interrupciones que afecten a su cómputo.
Las personas trabajadoras, sus representantes legales y la Inspección de Trabajo y Seguridad Social podrán acceder de forma inmediata al registro en el centro de trabajo, y en cualquier momento. Además, el registro deberá ser accesible de forma remota para la Inspección de Trabajo y Seguridad Social y para la representación de las personas trabajadoras y la empresa deberá conservar los registros durante cuatro años, poniéndolo a disposición de las personas trabajadoras, de sus representantes legales y de la Inspección de Trabajo.
Sobre la desconexión digital, la medida implica que un superior no podrá molestar a un empleado fuera de su horario de trabajo. No atender la comunicación o la petición de prestación laboral por medios digitales fuera de la jornada laboral no podrá generar consecuencias negativas, represalias o trato menos favorable para el empleado.
¿Qué pasa ahora? Toca ser aprobado por el Congreso de los Diputados
Las medidas anunciadas por el Gobierno de coalición tienen que ser refrendadas por el Congreso de los Diputados. El Ejecutivo espera tener las medidas aprobadas antes del verano, pero para eso, Sánchez y Díaz necesitan a sus socios parlamentarios.
Contando con el previsible 'no' de PP y Vox, queda la duda de la posición que adoptarán PNV y Junts. En el caso del PNV, no habría grandes problemas en obtener su apoyo porque en Euskadi esa reducción de la jornada laboral ya está activa desde hace tiempo en la Administración pública y en las grandes empresas, pero los nacionalistas vascos han advertido de que debe llegar al Congreso con el mayor consenso posible y que la medida no es de fácil aplicación en las pequeñas empresas.
Es precisamente en las pymes donde Junts ve el mayor de los problemas. Los de Puigdemont han dicho que el Gobierno tendrá que negociar con ellos y que no va a ser un camino fácil. Es decir, de primeras se prevé otra dura negociación para el Gobierno en la Cámara Baja. No obstante, este primer paso pone fin a meses de arduas negociaciones por parte del Ministerio de Trabajo de Yolanda Díaz, que lo celebraba con una frase lapidaria: "No vivimos para trabajar. Trabajamos para vivir".