Los pacientes hematoncológicos van al hospital a sacarse sangre, visitar a su médico y recibir tratamiento.
En la planta de oncología y hematología del hospital de Cuenca, los pacientes reciben quimioterapia en pupitres unos detrás de otros. En la misma posición y sin intimidad durante más de dos horas.
Hay algunos que sí reciben sus tratamientos en camillas. Pero otros tienen que hacerlo en sillas pegados a las camas de otros pacientes. A tarvés de unas imágenes, sus familiares denuncian esta situación. A ellos les toca esperar agolpados en el pasillo o en las escaleras por la falta de espacio.
El hospital dice ser consciente del problema y que tiene previsto realizar una ampliación.
Pero la plataforma en defensa de la sanidad publica critica que esta situación lleva así meses y que a escasos metros hay una planta cerrada con numerosas camas vacias.
Los habitantes de Cuenca no comprenden por qué llevan meses sufriendo recortes y a su vez la junta de Castilla la Mancha anuncia a bombo y platillo la construcción de un hospital nuevo en la provincia. Los trabajadores aseguran que están intentando hacer su trabajo de la mejor forma posible, pero en algunos casos como este, en unas condiciones nefastas.