El acto de clausura de la Convención Política del PSOE de A Coruña ha tenido que ser detenida durante unos minutos, después de que uno de los asistentes haya sufrido una indisposición mientras el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, daba su discurso.
Tras defender Sánchez la necesidad de "actualizar el proyecto político" en España y anunciar que van a "crear un centro de pensamiento liderado por Manu Escudero", se ha escuchado cómo alguien pedía un médico en la sala, momento en el que el presidente del Gobierno ha dejado de hablar y la vicepresidenta primera, María Jesús Montero, ha salido corriendo.
Así, se han vivido unos minutos de tensión, con todo el público en silencio. Finalmente, Sánchez ha retomado su discurso ocho minutos después, y lo primero que ha hecho ha sido mandar "un abrazo a Miguel para que se recupere cuanto antes", lo que ha provocado los aplausos de los asistentes al acto.
El líder del Ejecutivo ha continuado entonces con su discurso criticando que en España "no hay una oposición, sino un galimatías". "Esta semana hemos tenido la buena noticia del reforma del artículo 49, una reforma que ha contado con apoyo de todos salvo la ultraderecha Vox", ha destacado, al tiempo que ha pedido a Feijóo que "rectifica sus alianzas con Abascal y se abra a grandes acuerdos". "Nuestra mano está tendida", ha expresado Sánchez.
Según han indicado fuentes socialistas, la persona que ha sufrido una indisposición es un joven de unos 30 años que forma parte de la delegación de los socialistas de Navarra. El hombre ha sido atendido por los servicios médicos y también por el eurodiputado gallego Nicolás González Casares, que es enfermero, tras lo que ha salido en estado consciente del auditorio del Palacio de Congresos y Exposiciones de Coruña (Palexco) y ha sido trasladado a un centro médico.