La segunda comparecencia de Pedro Sánchez de este miércoles ha sido más corta y concisa que la realizada durante la mañana. Si el presidente del Gobierno arrancaba la jornada detallando el plan del Ejecutivo para los próximos meses del curso político que arranca, la tarde la ha centrado, ya desde Moncloa, en confirmar varios nombramientos ya avanzados en las horas previas.
El primero de ellos ha sido el de José Luis Escrivá como nuevo gobernador del Banco de España, un 'fichaje' ya anunciado por el ministro Carlos Cuerpo en el Congreso de los Diputados al que Sánchez ha trasladado su apoyo, calificando a Escrivá como "uno de los mejores economistas de nuestro país".
"-Escrivá- Es uno de los mayores expertos en politica monetaria. A lo largo de su carrera ha pasado por todos los espacios que deben componer la trayectoria de un economista de prestigio", ha resaltado Sánchez, que cree que su hasta ahora ministro será un "excelente" gobernador y ha aprovechado para repasar su extenso currículum.
También ha mencionado algunas de sus medidas más importantes como ministro, como la reforma de las pensiones, la reconstrucción del Pacto de Toledo, la creación del Ingreso Mínimo Vital o la gestión de la política migratoria, entre otras. "Muy pocos economistas tienen el conocimiento la experciencia y la altura de estado que tiene José Luis Escrivá", ha sentenciado Sánchez.
El segundo nombramiento ha sido el de la persona que sustituirá a José Luis Escrivá. Óscar López, hasta ahora jefe de Gabinete de la Presidencia del Gobierno, pasa a ser ministro de Transformación Digital, una persona a la que Sánchez dice conocer "desde hace mucho tiempo" y del que destaca su "capacidad política y de trabajo".
"Son buenos tiempos para los optimistas y malos para los agonías"
"Ha trabajo en distintas instituciones públicas, tanto nacionales como europeas, y también en el Gobierno de España, donde ha jugado un papel clave en la gestión publica como director del Gabinete de la Presidencia del Gobierno", defiende Sánchez, que ve en López, uno de sus hombres de confianza, a un ministro "clave" en el futuro.
El único cargo que quedaba vacante era el nuevo jefe de su Gabinete, eligiendo a Diego Rubio para ello. De este nombramiento ha destacado su "integridad, rigor ético y visión transversal", antes de hacer un nuevo aviso acerca las aspiraciones del Gobierno para este curso político.
"El Gobierno de España inicia este curso político con las pilas cargadas. España vive uno de sus mejores momentos de las últimas décadas. Donde antes hubo corrupción, hoy hay limpiez; donde hubo crisis territorial, hoy hay unión; donde hubo crisis económica y desempleo, recortes y precariedad, hoy hay crecimiento, empleo, dignidad laboral y salarial", ha resaltado.
Por último, Sánchez ha mandado un mensaje a "los agonías", asegurando que son "malos tiempos" para ellos y "buenos tiempos para los optimistas". "El Gobierno es optimista, respecto al presente y el futuro de España", ha sentenciado Sánchez, que ha tenido un arranque de curso político con mucha actividad y sentando las bases de su nuevo equipo.