Según han informado fuentes del gobierno catalán, el nuevo director de los Mossos será Pere Soler, que entre 2013 y 2016 fue director general de Servicios Penitenciarios de la Generalitat, cuando la consellería de Justicia la lideraba Germà Gordó, en sustitución de Xavier Martorell, que dimitió a raíz de informaciones que le vinculaban al caso de espionaje político de Método 3.
Nacido en 1967 en Terrassa (Barcelona), donde ha sido concejal de CiU en el consistorio, Pere Soler es licenciado en Derecho por la Universidad Autónoma de Barcelona (1991), máster en Derecho y Transmisiones Electrónicas por la Universidad de Valencia (2000-2001) y especialista en estudios europeos.
El conseller de Interior, Joaquim Forn, que asumió la cartera el pasado viernes en sustitución de Jordi Jané, le ha elegido para sustituir a Batlle por sus conocimientos jurídicos y administrativos, por la confianza que le merece su perfil político y porque ha liderado una dirección general compleja, como es la de prisiones, según han informado a Efe fuentes de Interior.
Se da el caso de que Batlle, que hoy ha dimitido por motivos políticos a dos meses y medio del referéndum que gobierno catalán ha anunciado para el próximo 1 de octubre, también ostentó entre 2003 y 2011, durante el tripartito, la dirección general de servicios penitenciarios, años antes de recalar al frente de los Mossos d'Esquadra, en 2014.
El nuevo director de los Mossos d'Esquadra, amigo personal del conseller de Territori, Josep Rull, y próximo al exconseller de Justicia Germà Gordó, fue nombrado director de Servicios Penitenciarios de la Generalitat en julio de 2013 en sustitución de Xavier Martorell, que dimitió acosado por su presunta vinculación con supuestos espionajes políticos a través de la agencia de detectives Método-3.
En aquella época, la consellería de Justicia la lideraba Germà Gordó, que recientemente ha abandonado el grupo de JxSí en el Parlament y ha pasado a ser diputado no adscrito después de que el TSJC acordara investigarle por el caso del 3%, sobre el supuesto cobro de comisiones de CDC.
Batlle, cuestionado por los partidos soberanistas que recelaban de su papel ante el 1-O, ha presentado hoy su dimisión por motivos políticos, después de que el pasado viernes renunció al cargo el hasta entonces conseller Jordi Jané, que fue relevado por Joaquim Forn, un político netamente independentista.