Las cartas con material explosivo enviadas a la Presidencia del Gobierno, a la embajada de Ucrania en Madrid y al Ministerio de Defensa fueron elaboradas presuntamente por un hombre jubilado de 74 años de Miranda de Ebro, en Burgos, que ha sido detenido.
Según ha podido saber laSexta, los investigadores de la Policía Nacional llegaron hasta el presunto responsable tras examinar varias pesquisas como el ADN, la caligrafía, los sellos, los sobres o el recorrido de las cartas.
La primera de ellas fue el ADN: se recogieron muestras de algunos artefactos, y tras introducirlos en la base de datos que comparten todos los cuerpos policiales, no dio ninguna coincidencia. A pesar de ello, el análisis de la caligrafía de los sobres manuscritos hizo pensar a los investigadores que se trataba de una persona mayor.
La pista que sí dio sus frutos fue el recorrido de las cartas. A pesar de que Correos no tiene un sistema de trazabilidad de sus envíos, la Policía utilizó un método artesanal y recogió las imágenes de las cámaras de las oficinas de Correos desde las que habían sido repartidos los paquetes.
Así, localizaron los paquetes en las cintas y, con los datos de fecha y hora, intentaron reconstruir el recorrido, que les llevó hasta Castilla y León, concretamente a Valladolid y Burgos.
Los sellos con los que estaban franqueadas las cartas no eran de tirada convencional, sino que correspondían a una serie conmemorativa de menor difusión que se vendieron en varias províncias a partir de abril de 2022.
Pero la pista clave que llevó hasta este hombre fueron los sobres utilizados: no eran sobres convencionales. Eran sobres con un troquelado muy especial y, gracias a ello, la Policía logró encontrar la empresa que había distribuido esos sobres mediante la venta online.
Tras comprobar todos los compradores, hubo una coincidencia que hizo saltar las alarmas: había un comprador en Burgos. Tras investigar al ahora detenido, los agentes comprobaron que también había comprado los sellos de la edición especial por internet.
El explosivo que contenían los paquetes era muy rudimentario, básicamente pólvora de petardos y pirotecnia, prensada con un pequeño dispositivo para causar la detonación. Algunos llevaban además rodamientos y pequeña tornillería a modo de metralla.