El grupo parlamentario de Podemos en Castilla-La Mancha va a registrar una proposición no de ley para instar al Gobierno central a que retire los restos de José Moscardó y Jaime Milans del Bosch del Alcázar de Toledo, que acoge el Museo del Ejército y la Biblioteca de Castilla-La Mancha.
En una rueda de prensa frente al Alcázar, el secretario general de Podemos Castilla-La Mancha, José García Molina, ha tildado de "vergüenza democrática" para el país que "estos traidores, declarados enemigos de la democracia y de las libertades", estén enterrados en el Alcázar y puedan ser "objeto de culto y exaltación".
García Molina, que también es vicepresidente segundo del Ejecutivo autonómico que preside Emiliano García-Page, ha apelado a la Ley de Memoria Histórica, que sancionó en su momento que era "un deber inaplazable" de la democracia española rendir homenaje y cuidar a las personas que habían sufrido agravios durante la Guerra Civil y la dictadura.
Por lo tanto, ha considerado que la persistencia de algunos de esos símbolos y monumentos son "un atentado contra los valores democráticos y de los derechos humanos", y está impidiendo "que podamos reconciliarnos con nuestro pasado y curar o cicatrizar las heridas", así como construir las bases "sólidas y definitivas" para una convivencia democrática "normal y normalizada".
El líder regional de Podemos ha recordado que ha pasado más de una década desde que se aprobó la Ley de Memoria Histórica y ha lamentado que "sigue sin cumplirse y sin materializarse", y en este sentido ha indicado que hay partidos políticos en este país a los que "no les parece una cuestión prioritaria y no tienen ninguna necesidad de hacerlo".