Casi cinco meses después de huir de la justicia española, la policía alemana retiene a Carles Puigdemont. El expresident acababa de cruzar en coche la frontera desde Dinamarca a raíz de la orden internacional de detención contra él y 5 de sus exconsellers fugados.
Su abogado decía desconocer su paradero:"No sé donde está ahora mismo, me acabo de despertar. Ayer hablé varias veces con él, por mensaje principalemente, y tampoco tengo plena consciencia de dónde estaba en cada momento".
Pero su ubicación era clave, porque en Finlandia, por ejemplo sí se contempla un delito similar al de rebelión en España, con penas de entre uno y diez años de cárcel. No pasa lo mismo en Bélgica.
Allí Puigdemont ya se entregó a la justicia que le dejaba en libertad vigilada al concluir que no existía riesgo de fuga.
"En Bélgica hay varias diferencias, por ejemplo se trata de un delito contra el orden público y no contra la forma de Gobierno. Está también tipificado para particulares y no autoridades, además exige siempre el uso de armas", explica Alfonso Pérez Medina, experto en Tribunales de laSexta.
Puigdemont está ahora mismo en una comisaría alemana a la espera de que se practiquen las "comprobaciones" oportunas en relación con la orden internacional de detención que tiene pendiente.