Si alguien pensó que los días de reflexión de Sánchez iban a suavizar el discurso del PP, se equivocaba. Lejos de aflojar, los de Feijóo han sacado todo el arsenal para seguir con sus ataques hacia el todavía presidente del Gobierno. Lo hacen hablando de presidente a la fuga, de miseria moral y hasta se mofan por decir en su carta a los ciudadanos que es un hombre enamorado de su mujer. Es evidente que no hay límites.
Después de que la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, dijera que esperan "al lunes viendo la telenovela que él [Pedro Sánchez], pero que también protagoniza" podría parecer que solo le hacen falta palomitas. En esta línea, Gamarra asegura que el papel de Sánchez es claro: "Es un falso victimismo para ocultar un problema político y judicial que además esconde".
Aunque la presidenta popular de la Junta de Extremadura, María Guardiola, mofa mediante, destaca otro arte: el de la literatura epistolar de Sánchez: "No sé muy bien a quién va dirigida esa carta. No sé si está dirigida a sus votantes, a la oposición o a los corintios, no tengo ni idea". Entre capítulo y capítulo, Guardiola pide que el presidente ofrezca explicaciones porque no hace falta esperar para saber el final ya que considera que "lo que debía pasar tenía que pasar ya". De hecho, tacha la situación de "pantomima que hace mal al país".
Para el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, el retiro de Sánchez parece tener un tono algo más bíblico, puesto que el recién casado asegura que "están organizando romerías para decir 'Amado líder, quédate, merece la pena, sin ti España se cae, sin ti la democracia no tiene futuro en España'".
En cambio y al mismo tiempo, el portavoz de los populares en el Congreso, Miguel Tellado, tira de filosofía a la hora de afirmar que "no va de elegir entre el amor o el fascismo", mientras que tilda a Sánchez de ser un presidente a la fuga que deja sus funciones y se escuda en el victimismo, ha recriminado Tellado.
Después de pasar de hablar de "victimización" y "estrategia" a plantearse este viernes una posible dimisión del presidente los populares tienen contra Sánchez dos vías: la comisión de investigación del Senado, donde no cierra la puerta a citar a Sánchez ni a su mujer, y los tribunales, donde, según fuentes del PP, se plantea llevar su denuncia por conflicto de intereses, recurriendo ante el Tribunal Superior de Justicia por la vía contencioso-administrativa.