Profesionales del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona han realizado el primer trasplante pulmonar en España a un paciente de 51 años que se contagió de coronavirus, según ha indicado Antonio Roman, director asistencial del centro.
"Es el primero, pero seguramente no será el último", ha advertido con preocupación durante una rueda de prensa el jefe de Cirugía Torácica y Trasplante Pulmonar del centro, Alberto Jáuregui, en referencia a las secuelas que deja la enfermedad.
El paciente, que no tenía ninguna patología respiratoria cuando se infectó de coronavirus el pasado enero, pasó 127 días en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) a causa de una infección grave por el coronavirus, de los que 122 estuvo con oxigenación extracorpórea". "Los pulmones no funcionaban por el COVID-19", ha señalado al respecto Jordi Riera, director del programa ECMO del centro.
En este sentido, el experto ha indicado que el hombre, de 51 años, ingresó con una neumonía bilateral grave y la ayuda de un ventilador para respirar. Sin embargo, a los cinco días la ventilación mecánica no era suficiente y necesitó el apoyo de la ECMO.
La ECMO, tal y como ha explicado Riera, es un dispositivo de oxigenación extracorpórea que se conecta al paciente para extraer su sangre y devolverla al cuerpo oxigenada, y se utiliza cuando el corazón o los pulmones no funcionan, por lo que no cura, sino que ayuda a "ganar tiempo" para que el enfermo se recupere.
Tras tres meses en la UCI, los pulmones seguían sin responderle
Tras pasar tres meses conectado, los pulmones seguían sin responderle y las imágenes diagnósticas mostraban que no había señales de mejora, por lo que los profesionales de Vall d'Hebron decidieron que la "única alternativa" posible era un trasplante pulmonar, ha relatado Jáuregui.
Marible Rochera, profesional del servicio de Anestesiología, ha destacado en este sentido que el "reto era aún mayor" debido a que los pulmones no funcionaban nada, y no tenían experiencia previa de un paciente con oxigenación extracorpórea tan prolongada antes de un trasplante de pulmón.
Una complicada cirugía de nueve horas
En la misma línea, Jáuregui ha subrayado que fue una cirugía especialmente complicada por el estado de los pulmones y el tiempo que el paciente estuvo con apoyo de oxígeno. "Nunca había visto unos pulmones así. El color, la estructura, la función. Estaban totalmente deteriorados", ha expresado.
Finalmente, el paciente, que figuraba en lista preferente para la recepción de unos pulmones, fue intervenido por un equipo multidisciplinario que realizó la cirugía durante más de nueve horas. Ahora, el hombre se recupera de la operación en planta y en una semana está previsto que reciba el alta y pueda irse a casa, aunque todavía "le queda una recuperación muy intensa" en la que deberá hacer rehabilitación, tal y como ha afirmado Jáuregui.
Además, el especialista ha indicado que a estas alturas todavía no se sabe con exactitud por qué pacientes sin ninguna patología respiratoria, como es el caso de Jordi, acaban en una situación tan extrema a causa del coronavirus, hasta el punto de requerir un nuevo pulmón, aunque ha señalado que elementos como la obesidad o estar inmunodeprimido está comprobado que incrementan el riesgo de sufrir complicaciones tras contagiarse de COVID-19.
Por su parte, la supervisora de enfermería en la coordinación de trasplantes, Carme Vallès, ha querido recordar la "generosidad" de la familia del donante, que "en un momento de máximo dolor" autorizó la extracción del pulmón. "Podemos tener toda la tecnología del mundo y los mejores profesionales, pero si no hay donante, no hay trasplante", ha enfatizado.