El PP tiene previsto proponer a los actuales presidentes del Congreso, Ana Pastor, y el Senado, Pío García-Escudero, para ocupar una de las vicepresidencias de estas dos cámaras, respectivamente, según ha informado fuentes de la dirección del partido.

Esta es la intención del PP que se concretará "salvo sorpresa", han indicado, el próximo lunes en la reunión de los grupos parlamentarios populares que el líder del partido, Pablo Casado, presidirá en el Congreso.

El encuentro servirá para designar a los representantes del PP para las mesas del Congreso y Senado que se elegirán en la constitución de las Cortes el próximo martes, cuando se configuran los órganos rectores de ambas cámaras.

A los populares les corresponden dos puestos en la Mesa de la Cámara baja y tres en el Senado, aunque está por determinar a qué vicepresidencias optarán en cada una.

Tanto Pastor como García-Escudero son personas que forman parte del "equipo" del líder del PP, Pablo Casado, han asegurado las mismas fuentes, con el que se mantienen un contacto permanente y se les ha ofrecido estar "donde quieran" en esta nueva legislatura que se inicia el martes.

Por eso, fuentes de Génova esperan que su lugar esté en los puestos de mayor responsabilidad a los que opta el partido en el Congreso y el Senado, para cuyas presidencias el PSOE ha propuesto a los socialistas Meritxell Batet y Manuel Cruz, respectivamente.

Pastor también optará a repetir para la Presidencia del Congreso, ya que el PP anunció la semana pasada que va a proponerla en la sesión constitutiva del martes, aunque no cuenta con opciones porque necesita la mayoría absoluta en primera votación o la simple en una segunda y los populares solo tienen 66 diputados.

El PSOE y Unidas Podemos ya llegaron a un acuerdo para la distribución de los puestos de la Mesa del Congreso, por el que los socialistas tendrán la Presidencia, una vicepresidencia y una secretaría y el partido de Pablo Iglesias, la vicepresidencia primera, que ocupará Gloria Elizo, y la secretaría primera.

Para el PP quedaría una de las cuatro vicepresidencias del Congreso, así como una de las dos que tiene el Senado, que son a las que optarían Pastor y García-Escudero.