En Moncloa hay cierta preocupación sobre cómo conjugar las vicepresidencias de Nadia Calviño y de Yolanda Díaz, cómo se corregirá la distorsión que, dicen, se va a dar con Díaz de vicepresidenta segunda y con Calviño dirigiendo la política económica.
Según informa Josué Coello, ahora no hay cambios a la vista. La idea es que Calviño tenga mayor peso económico y Díaz siga al frente de Trabajo para continuar con el diálogo social. De hecho, mañana comienzan las negociaciones para derogar la reforma laboral. Por ahora no se plantean más cambios.
Este misma mañana, tras el Cosnejo de Minsitros, Sánchez e Iglesias han mantenido una breve reunión y ambos, según informa Moncloa, consideran que hay acuerdo en los cambios que deben acometerse y solamente falta rematar algunos detalles en base al acuerdo de coalición.
No dan pistas sobre cuándo anunciará Pedro Sánchez la reestructuración de su Gobierno y sobre la posible entrada de Ione Belarra al frente del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, como ha propuesto Pablo Iglesias, reconocen que es un perfil duro.
En cuanto a la salida de Iglesias, fuentes del Gobierno y del PSOE apuntan que el presidente lo encajó bien, pero creen que si dentro el Ejecutivo Iglesias se ha controlado poco, fuera opinan que será peor.
Sí confían en que Yolanda Díaz ayudará a pacificar la coalición y Sánchez tiene la mejor de las opiniones sobre ella, por su talante -dicen- y porque consideran que lo ha hecho muy bien.
Este movimiento dentro del Ejecutivo ha sido analizado este martes por otros partidos políticos, entre ellos el PNV, socio de investidura de Sánchez. Aitor Esteban cree que "seguramente la coalición se va a mantener, pero este movimiento mina la coalición", y dice que habrá que estar a la espera de ver "cómo se reconstituye el futuro de la legislatura".
Sobre el anuncio de Iglesias, ha afeado al líder de Podemos las formas: "No queda bien llamando a Sánchez que además estaba en Francia. No es estético que fuera una llamada y le pillara por sorpresa. Las formas me llaman la atención".
Adriana Lastra, la portavoz socialista, ha señalado que "este gobierno funciona": "Hay un acuerdo firmado con Podemos. La colación funciona. Así va a seguir siendo con Iglesias y con el resto de ministros". Apunta que hay una buena relación con los socios "y seguiremos trabajando en ello".
Joan Baldoví, de Compromís, considera que con la salida de Iglesias, "bajará la temperatura política del Gobierno": "Con Yolanda Díaz habrá un clima de que se pueden acordar cosas sin tanto espectáculo".
Dice que le hubiera gustado que se hubiera quedado para terminar algunas cosas, como la Ley de Vivienda -"dentro se hacen más cosas", pero a su juicio, Iglesias "prefiere el papel de Pepito Grilo y no de gestor".
"Viendo su trayectoria, dura poco en los sitios, se mueve mucho. Se encuentra más cómodo en otros papeles que no es la gestión",ha añadido.
Campaña madrileña
Aunque no se atreven a hacer pronóstico, confían en que la polarización PP-Podemos pueda beneficiar la candidatura de Ángel Gabilondo "y ensalzar su perfil de hombre sensato".
Aseguran estar contentos de que la candidatura de Pablo Iglesias posibilite, dicen, que Unidas Podemos siga teniendo representación en la Asamblea. Si no fuera así, añaden, reconocen que Gabilondo no podría tener ninguna aspiración para gobernar .
El PSOE deja claro que ellos tienen una candidatura autónoma y ganadora y que no se van a aliar con nadie antes de las elecciones.