El PSOE y ERC han llegado a un acuerdo para la reforma del delito de malversación que rebaja las pretensiones de los republicanos e impone la propuesta de los socialistas. Con lo pactado, se recupera el delito de administración desleal, para cuando no exista ánimo de lucro o enriquecimiento personal en el desvío o uso de fondos públicos, perose rebajarán las penas.
Este delito estará castigado en estos casos con un máximo de cuatro años prisión frente a los ocho que marca el actual Código Penal en su tipo agravado. También se reducen las penas de inhabilitación: hasta un máximo de seis años. Así, la inhabilitación máxima es dos años superior a la que inicialmente proponía Esquerra.
Bajan también los tipos máximos de la malversación por los que fueron condenados los líderes del 'procés': de 12 a cuatro años. Un extremo que perseguía ERC.
El PSOE, con este acuerdo, renuncia además a la cláusula de que las condenas firmes no se puedan recurrir.
Reunida en sesión extraordinaria en la tarde del lunes, la ponencia de la Comisión de Justicia ha incorporado esta y otras enmiendas a la proposición de ley impulsada por el PSOE y Unidas Podemospara eliminar el delito de sedición y convertirlo en uno agravado de desórdenes públicos.
La enmienda transaccional firmada por el PSOE y ERC distingue entre tres tipos de malversación y, según el grupo catalán, ninguno de ellos se corresponde con las conductas que llevaron a organizar el 1-O.
El Partido Popular reprocha al PSOE que la reforma es un traje a medida para los independentistas. La única salida, dice su líder, Alberto Núñez Feijóo, es convocar elecciones "si no se da marcha atrás con los indultos, en la derogación de la sedición o en la rebaja de la corrupción.
Los socialistas responden que su intención es volver a la situación previa al 2015, cuando el PP modificó el Código Penal tras la consulta del 9N que organizó Artur Mas.
Además, Pedro Sánchez defiende estas negociaciones como parte de la política de "conciliación" en Cataluña y la desjudicialización de la política. "Hemos decidido rescatar a Cataluña de la crispación y de la confrontación para devolverla al marco y al territorio que nunca debió abandonar: el de la convivencia y la concordia", ha reivindicado en anteriores ocasiones el presidente del Gobierno.
Sin embargo, y aunque en un primer momento PSOE y Unidas Podemos presentaban una propuesta de manera conjunta, los de la formación morada se han desligado de las conversaciones con los republicanos. Antes de la reunión entre socialistas y ERC, desde Podemos advertían que no su firma no aparecería en este acuerdo, aunque eso no implica que no la vayan a respaldar. Tal y como han adelantado, estudiaran y valorarán su posición sobre esta enmienda.