La votación vivida este martes en el Congreso de los Diputados acabó suponiendo una nueva fractura entre el Gobierno y Junts para sacar adelante la ley de amnistía, con la formación catalana incrementando sus exigencias a un texto que ellos habían apoyado hasta antes decir 'no' en la Cámara Baja.
Ahora, la amnistía y las conversaciones para sacar adelante la ley están paradas, lo que abre un periodo para la reflexión. De ahora en adelante, hay tres escenarios posibles que se abren que pueden marcar una legislatura que va a ser de todo, menos plácida para el Gobierno de coalición.
El primer escenario es que el Gobierno ceda y amplíe las personas que se verían beneficiadas por la ley de amnistía. Sin embargo, este escenario no parece realista escuchando al Gobierno, con Félix Bolaños y Esther Peña dejando claro que es Junts quien tiene que "recapacitar" en su postura.
El único matiz que se ha abierto en las últimas horas ha llegado por parte de María Jesús Montero, que ha asegurado que "siempre hay margen para negociar". La vicepresidenta del Gobierno cree que cuando hay "una voluntad clara de diálogo por ambas partes" puede haber margen para cambios.
No obstante, la ministra de Educación, Pilar Alegría, parece cerrar esta puerta, ya que insiste en que la ley es "impoluta desde el punto de vista constitucional", contando con una "absoluta seguridad jurídica".
Esto nos lleva al segundo escenario: que sean Junts y Puigdemont quienes cendan. La actual ley de amnistía no ampara únicamente al expresident de la Generalitat, siendo cientos de personas las que necesitan la ley para que las consecuencias del 'procés' no les repercutan.
Precisamente por esto, desde ERC aprietan a Junts para que cambien su postura, como defiende la diputada Pilar Vallugera: "No iba de partidos, no iba de la cúpula dirigente. Iba por los chavales que han visto su vida interrumpida por acusaciones absolutamente salvajes y por todas las causas abiertas".
Si ninguno de los dos cede, ni el Gobierno ni Junts, hay un tercer escenario que se abre: una legislatura sin el apoyo de Junts al Gobierno. Desde el Ejecutivo insisten en que la legislatura será larga y que depende únicamente "del presidente del Gobierno", Pedro Sánchez.