El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha asegurado en su discurso de toma de posesión que asume "la voz del pueblo" que les pide "cambio, justicia e igualdad" y que quiere que su mandato suponga "la recuperación del poder de los ciudadanos y un gobierno al servicio de las personas".

Tras prometer su cargo ante el pleno de Les Corts Valencianes y convertirse en el sexto presidente de la Generalitat valenciana de la etapa autonómica, Puig ha realizado una "Proposición" sobre su programa de gobierno, que no ha sido objeto de debate y con la que ha concluido la protocolaria sesión plenaria de hoy.

En su alocución, en la que ha alternado el valenciano y el castellano, ha asegurado que comparece "para cumplir la promesa de lealtad al pueblo valenciano" y ha agradecido la confianza de los diputados y "las convicciones", "el esfuerzo" y "las esperanzas" de los valencianos, que les han abierto las puertas "de un nuevo tiempo".

Ha dicho que quiere que su mandato suponga "un cambio fundamental: la recuperación del poder por parte de los ciudadanos y un gobierno al servicio de las personas" y, para ello, ha dicho que estará presidido por la regeneración ética, la lucha contra la desigualdad, una cultura potente y un "nuevo contrato social que modernice la educación, la sanidad y los servicios sociales".

Más de 300 invitados siguen en Les Corts, desde la tribuna del hemiciclo y en una sala anexa, el desarrollo del tercer pleno de esta legislatura, entre ellos el expresidente del gobierno José Luis Rodríguez Zapatero, el exministro Ángel Gabilondo, el secretario de UGT, Cándido Méndez, así como los padres, la mujer y los hijos de Puig.