El líder de Junts, Carles Puigdemont, ve "evidente" que, con el calendario electoral planteado y la tramitación de la ley de amnistía, podrá regresar a Cataluña para el debate de investidura tras las elecciones catalanas del próximo 12 de mayo, convocadas este miércoles tras el fracaso de los presupuestos autonómicos.
"Con el calendario que propone el presidente Aragonés es evidente que podré estar presente en el debate de investidura y me haría mucha ilusión", dijo Puigdemont a la prensa desde el Parlamento Europeo en Estrasburgo (Francia).
El también eurodiputado de Junts no ha querido aclarar si será candidato a estas elecciones y ha afirmado que, en caso de hacerlo, "afectaría" a sus planes de ser candidato al Parlamento Europeo. No obstante, su intención es "consultar" si ambas candidaturas son compatibles.
"Es mi obligación y estoy en contacto permanente con la cúpula de mi partido, como sabéis, por las negociaciones que tenemos en otro nivel y por todo el momento político que vive Cataluña", ha agregado, a lo que ha añadido: "Es evidente que hablamos de todo. También hemos hablado de escenarios electorales en muchas ocasiones, pero honestamente todo es muy reciente. En estos momentos en los que les estoy hablando yo no he tenido tiempo aún de reunirme con mi partido".
Las elecciones catalanas coincidirán con la recta final de la tramitación de la ley de amnistía que podría estar en vigor a finales del mismo mes, tras su paso por el Senado y su posterior aprobación definitiva en el Congreso.
El experto en Tribunales de laSexta, Alfonso Pérez Medina, asegura que Puigdemont podría ser candidato en las elecciones en Cataluña al no encontrarse inhabilitado. Sobre él pesa una orden de detención a nivel nacional, lo que le permitiría presentarse como candidato, pero correría el riesgo de ser detenido si entra en el territorio nacional.
La única posibilidad que cabría para Puigdemont es que, una vez aprobada la ley de amnistía y publicada en el Boletín Oficial del Estado, el juez Llarena levante la orden de detención en aplicación de la nueva norma, algo que dan por descontado fuentes jurídicas consultadas por laSexta. Los plazos parlamentarios tampoco juegan a favor de Puigdemont, ya que se espera que la ley de amnistía no sea aprobada hasta julio.