Cese temporal del diálogo
Puigdemont suspende negociaciones con el PSOE y exige una "reunión urgente" en Suiza: "El riesgo de ruptura es real"
Sí, pero... La suspensión anunciada por Puigdemont afectaría a las conversaciones sobre los Presupuestos, pero no a otros asuntos como la amnistía, el catalán, la inmigración o un SMI para Cataluña. "No nos hemos instalado en la trinchera del 'no a todo'", afirma.
Golpe en la mesa de Carles Puigdemont. El líder de Junts paraliza el diálogo con el PSOE y reclama una "reunión urgente" en Suiza para mediar y verificar el cumplimiento de los acuerdos. Así lo ha anunciado en una comparecencia este viernes desde Bruselas, donde ha reunido a la cúpula de su partido. "Suspendemos las negociaciones políticas con el PSOE en cuestiones sectoriales", ha aseverado, avanzando la convocatoria de "una reunión urgente y extraordinaria del mecanismo de Suiza".
Posteriormente, ha precisado que esa suspensión incluye las negociaciones en torno a los Presupuestos Generales del Estado y otros decretos e iniciativas legislativas, pero se ha mostrado dispuesto a seguir hablando de asuntos como la amnistía, el catalán o la inmigración. "No nos hemos instalado en la trinchera del 'no a todo'. Haremos sumas y restas", ha reconocido, poniendo como ejemplo un Salario Mínimo Interprofesional en Cataluña referenciado al coste de la vida en la comunidad.
"Suspensión quiere decir que leyes tan relevantes como son los Presupuestos nosotros no nos vamos a sentar a negociar. Si hay decretos que se han de convalidar, que no nos busquen. Si hay iniciativas legislativas del Gobierno español unilaterales, como acostumbra a hacer, que no nos busquen", ha advertido.
Este anuncio de Puigdemont llega después de que la Mesa del Congreso retrasara de nuevo su decisión sobre si admite o no a trámite la iniciativa de Junts para que el Congreso inste al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a someterse a una cuestión de confianza. Una decisión, ha dicho Puigdemont, que "fue no tomar ninguna decisión", lo que, a su juicio, implica que los socialistas han entendido que Junts "va en serio" y que "el riesgo de la ruptura es real", por lo que han preferido no dar un "portazo".
"Si no recuperamos la confianza y no se respeta el acuerdo y su espíritu, las cosas no irán bien", ha avisado el dirigente independentista, que ha insistido en que su formación no va de farol. Las razones de Junts para reclamar esa cuestión de confianza, ha dicho, permanecen "intactas". "Lo que no se puede hacer es reconocer que existe un conflicto político y por otro lado, el mismo partido cuando gobierna en Cataluña dice que el mismo conflicto ya no existe", ha reprochado asimismo.
"Seguimos queriendo saber si el PSOE cree o no en este acuerdo en todos sus aspectos", ha apostillado. "Para evitar que se juegue con el calendario y se vayan tirando balones hacia adelante, nosotros hoy suspendemos las negociaciones políticas con el PSOE en cuestiones sectoriales", ha añadido. "Hasta que no se resuelva esta crisis no podemos seguir negociando nada a nivel sectorial con alguien que no ha recuperado nuestra confianza", ha incidido.
"Si nos hemos dotado de un mecanismo de verificación independiente es precisamente para que cuando haya situaciones de conflicto haya alguien que ha estado presente en todas las reuniones, que ha arbitrado, que toma nota de todo, que diga, como voz independiente y autorizada: 'Sí, estamos más lejos de lo que debíamos estar o no'", ha reivindicado. "Pero queremos que sepan que estamos en un punto final, esto no puede seguir más tiempo así", ha insistido.
La foto con Sánchez, innecesaria para "desencallar"
Por otra parte, Puigdemont ha querido dejar claro que no necesita reunirse con Pedro Sánchez para resolver la situación. "Podría pasar perfectamente sin verme con el presidente Sánchez a cambio de que se cumpliera todo lo que tenemos pactado", ha dicho, insistiendo en que la situación "no está encallada por eso".
"Al presidente Sánchez no le hace falta reunirse conmigo para desencallar la situación", ha reiterado Puigdemont, que ha asegurado que no ha tenido "ninguna conversación, ni directa ni indirecta", con el líder socialista, "ni telefónica ni por mensajería". "No ha habido ningún contacto directo con el presidente Sánchez", ha remachado.
Por otra parte, Puigdemont ha negado que exista una negociación con el PP para presentar una moción de censura, aunque ha dicho entender la lógica que mueve a los 'populares', porque han visto que "existe una oportunidad". A su vez, no obstante, el expresident ha defendido que cuando un Gobierno pierde la mayoría parlamentaria, debería ser automático convocar elecciones. "Si un Gobierno está investido con unos votos y esos votos ya no los tiene, no tiene sentido que siga gobernando", ha sentenciado.
Moncloa insiste en que cumple sus compromisos
Tras las palabras de Puigdemont, fuentes de Moncloa han traslado a laSexta un mensaje cargado de prudencia. Desde el Gobierno insisten en que están donde estaban y van a cumplir sus compromisos. La apuesta del Ejecutivo y del PSOE, dicen, es seguir negociando.
En esta misma línea se ha pronunciado el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños. "Cuando llegamos a acuerdos con fuerzas políticas distintas a la nuestra, cumplimos esos acuerdos", ha defendido, incidiendo en que algunos de los acuerdos suscritos con Junts "ya están en el Boletín Oficial del Estado" y otros están "en vías de materializarse" o aún en negociación.
"El Gobierno cumple los acuerdos y lo hace siempre", ha subrayado el ministro, que ha indicado que "cuando hay alguna discrepancia", la "fórmula" del Ejecutivo es el "diálogo". "Somos capaces de sentarnos con quien piensa diferente, llegar a acuerdos, llegar a consensos y superar cualquier discrepancia. Y eso lo vamos a hacer con Junts y con cualquier otra fuerza política", ha sostenido.