Fernando Peña es la otra persona de relevancia que hay que tener en cuenta al hablar del 'caso Nummaria'. Se trata de un colaborador habitual de la televisión de los años 90 que denunciaba la complejidad que había adquirido el IRPF. Poco después se convirtió en el cerebro de Nummaria, el bufete de los famosos, ayudándoles a pagar menos impuestos según la Fiscalía.

Según la acusación, el entramado empezaba en Nummaria. Con Peña contactaban numerosos clientes, como Arias y Duato, a los que les ayudaba a pagar menos impuestos a través de sociedades opacas en lugares como Reino Unido, Costa Rica y Canadá. Ahora, sus clientes se sacuden las culpas.

"Es una persona en la que confías plenamente, Fernando Peña, y me siento muy traicionada, claro que sí", reconocía Duato a los medios de comunicación. Ahora, Peña es el principal acusado de un caso en el que la Fiscalía le pide 298 años de prisión.

Es especialmente llamativo el giro en la situación de Peña, que llegó a ver como una "buena noticia" el hecho de "tener localizadas a las personas que no han cumplido con sus obligaciones fiscales". La clave del juicio será dirimir si Peña urdió la trama en solitario o si contaba con la aprobación de sus clientes.

El abogado penalista experto en delitos fiscales Andrés Malueda explica que Duato y Arias tenían que "ser conscientes" de que evitar pagar una buena parte de sus impuestos "no es del todo correcto". En el arranque del juicio, su abogado busca anular las pruebas por cómo se hizo el registro en el despacho, asegurando que Peña se encontró la cámara de su despacho "arrancada". De momento, sigue sentado en primera fila del juicio, acompañado de otros empleados y clientes de Nummaria.