A Rajoy los líos de la Operación Lezo le han pillado en otro continentey allí al presidente sólo le interesa resaltar la economía: "Vamos a mirar al futuro con optimismo realista, así somos los españoles".
Pero la realidad en España es que la oposición ha empezado a pedir cabezas y de momento no va a dimitir ni Zoido ni Catalá, porque Rajoy, fuera de cámaras, ha dicho que no los va cesar.
Aunque la oposición seguirá con la ofensiva porque las explicaciones que empezaron a dar no convencen. Catalá, por ejemplo, acusó de antisistema a los que criticaron que mandará un lioso mensaje a González. En el PP creen que las cosas se sacan de quicio: "Buscar tres pies al gato es un camino erróneo".
El otro ministro salpicado por la Operación Lezo también ha tenido que dar explicaciones y así justificó Zoido la reunión de su número dos con el hermano del expresidente de Madrid: "¿O procuraríamos en todo caso ocultarnos como lo hacíamos antes?".
Además el ministro del Interior también recibió una felicitación de González e insiste en que fue una llamada de cortesía.