La investigación de Border Forensics, Centro Iridia y la Asociación Marroquí de Derechos Humanos (AMDH), que ha publicado documentos que prueban que Marruecos desplegó tropas un día antes del salto masivo de Melilla, trata de desmontar, uno a uno, los argumentos de la Fiscalía del Estado por los que se cerró la investigación sobre lo ocurrido en la tragedia de Melilla el pasado 24 de junio de 2022.
Uno de estos argumentos se basa en que las fuerzas de seguridad españolas no se habían percatado de que las vidas de las personas migrantes estaban en peligro de muerte. Para probar lo contrario, utilizan un vídeo grabado por un periodista ese día junto a la valla, en el que se ve andando a dos agentes de la Guardia Civil. Con una captura de imagen de este vídeo hacen una recreación 3D de los agentes y el punto en el que se encuentran, y girando la cámara demuestran que veían perfectamente el patio del paso fronterizo del Barrio Chino donde los gendarmes marroquíes golpeaban brutalmente a las personas migrantes: "Las fuerzas de seguridad españolas vieron en todo momento la violencia que se ejerció dentro. Eran conscientes y participaron. Además, hay vídeos del dron y del helicóptero donde también se ve", determina Maite Daniela Lo Coco, investigadora de este estudio. "Curiosamente, este dron graba hasta el momento en el que se produjo un colapso en unos tornos, en los que también murieron varios aplastados. En ese instante, graba hacia otro lado, según los agentes, porque consideraban que eso tampoco suponía un riesgo para la vida", añade.
"Una trampa mortal"
En el informe de Fiscalía, según Lo Coco, indican que muchas muertes se produjeron en ese punto por "asfixias mecánicas". Es decir, responsabilizan de las muertes a las propias personas migrantes: "Muchos de los testimonios que hemos recogido indican que muchas muertes se produjeron por los golpes, por el humo -no podían respirar- y por aplastamientos", desarrolla Sani Ladan, también investigador de este documental e informe. "Metieron a los migrantes en un espacio cerrado en los que estaban acechados por los gendarmes por un lado y por la Guardia Civil por el otro. En el que eran atacados con material antidisturbios por todos lados. Se trataba de una trampa mortal".
Ladan subraya además que las fuerzas de seguridad española utilizaron también material antidisturbios desde fuera del paso fronterizo y que, cuando algunos migrantes llegaron a la zona española, los maniataron en el suelo. "En un vídeo grabado por el periodista Javier Angosto se escucha cómo le comenta a su compañero que los agentes españoles tienen a varios migrantes atados con bridas en el suelo. No se les ve pero se les escucha", matiza Maite Daniela Lo Coco.
Alfadel Imran Aurrahman, uno de los supervivientes, destaca que "no eran solo golpes, era el odio que tenían… Era cómo si le hubiéramos hecho algo a la Policía", lamenta.
Tanto Sani Ladan como Maite Daniela Lo Coco subrayan que esta investigación debería valer para que el Gobierno de España se hiciera responsable de lo que ocurrió ese día en la frontera, así como diferentes organismos internacionales. "Estos hechos y esas imágenes de cuerpos apilados unos sobre otros bajo el sol evidencian una negrofobia palpable. Este tipo de cosas y este tipo de imágenes solo se dan cuando hablamos de cuerpos negros, totalmente deshumanizados", sentencia Ladan.
El Ministerio de Interior: "La Guardia Civil actuó con proporcionalidad"
En relación a esta investigación, desde el Ministerio de Interior subrayan que "la Fiscalía General del Estado cerró su investigación sobre los trágicos sucesos que tuvieron lugar el 24 de junio de 2022 sin que advirtiera de ninguna vulneración o actitud negligente por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Con el mismo resultado se cerró la investigación abierta por el Defensor del Pueblo", exponen.
"En todo caso, reiteramos la postura ya dicha: la Guardia Civil actuó con proporcionalidad y legalidad, y con un respeto absoluto a los derechos humanos", subrayan. LaSexta Noticias ha preguntado sobre las averiguaciones de este informe a la embajada de Marruecos en España y, de momento, no ha recibido respuesta.