"Entre tú y yo, voy a ser egoísta, para mí es comodísimo porque como reina cumple de maravilla. Encima, aguanta, no se va con otro". Unas palabras del rey emérito con las que dejaba claro que la relación entre él y la reina Sofía estaba rota. Así lo desvela 'OKDIARIO' en unos nuevos audios publicados de las conversaciones entre Juan Carlos I y Bárbara Rey en el que comentan la relación que tenía el matrimonio de la Familia Real durante los años 90.

En uno de los audios, el emérito lamentaba que la comunicación con su esposa era nula, llegando incluso a vivir separados dentro de la residencia de la Familia Real. "Yo vivo ahora, hasta que arreglen una parte de la casa, que no sé cuándo estará arreglada, en la parte de la piscina, que está separada de la casa", afirmaba a su amante. Era tal la gravedad del asunto, que el propio Juan Carlos I confirmaba a Bárbara Rey que lleva sin comer con ella cerca de 15 días y que comía sola en su cuarto.

No solo eso, sino que Juan Carlos I animó a Sofía que reorganizase su vida: "El otro día, cuando yo me fui a Palma, ella se fue a París y a Londres. Pues muy bien. Me pareció muy bien. Pues perfecto". Además, en otra de los audios publicados por 'OKDIARIO', el rey corroboraba que no estaba con la reina y que hacían vida completamente separados, llegando a decir que "como Rey acerté, hice bingo, como profesional hace un papel de número 1".

Así fueron las conversaciones entre el rey Juan Carlos I y Bárbara Rey a las que ha tenido acceso 'OKDIARIO' en el que comentan la relación que tenían en los años 90 los reyes de España:

Juan Carlos I.- Pues, claro… Yo llevo sin cenar y almorzar con ella solos… yo creo que 15 días. Y eso que no están los niños en casa, ¿eh? No está ni su hermana.

Bárbara Rey.- ¿Con quién come ella?

Juan Carlos I.- Se encierra en su cuarto. Cuando yo veo que está la cena y el criado… el tal… No baja, se queda en su cuarto. Está enfadada conmigo.

Bárbara Rey.- ¿No quiere estar contigo?

Juan Carlos I.- No. No entiende que yo un sábado y domingo me vaya… Por supuesto que es duro si quieres. “Pero organízate tú”, le digo.

Bárbara Rey.- Que te vayas… ¿dónde?

Juan Carlos I.- Me fui el otro día… Me fui a Palma y me fui en el barco.

Bárbara Rey.- Se molestó…

Juan Carlos I.- ¡Por supuesto! ¡Hombre, es natural! Ahora ya no se molesta porque antes se molestaba por cualquier cosa. Se molestaba, por ejemplo, porque le cogía la mano en público. (…) El otro día, cuando yo me fui a Palma, ella se fue a París y a Londres. Pues muy bien. Me pareció muy bien. Pues perfecto.

Bárbara Rey.- Y cuando viaja, ¿va en avión privado?

Juan Carlos I.- No. Cuando va sola, no. Cuando va privadamente, no.

Bárbara Rey.- Tú no la ves… Porque si no come y no cena…

Juan Carlos I.- No, no. No desayuno tampoco con ella.

Bárbara Rey.- Sólo la ves en actos oficiales…

Juan Carlos I.- Y, además, yo vivo ahora, hasta que arreglen una parte de la casa, que no sé cuándo estará arreglada… yo creo que está casi, pero, en fin, no sé… vivo en la parte de la piscina, que está separada de la casa.

Bárbara Rey.- O sea, que ni la ves…

Juan Carlos I.- No, vida familiar, ninguna. En verano algo más, pero no hablamos. Yo nunca hablo con ella como ahora hablo contigo.

Bárbara Rey.- ¿Nunca?

Juan Carlos I: ¡Nunca!