Hace dos semanas Rita Barberá confirmó su intención de colaborar con la Justicia, una verdad que ha plasmado en once folios que ya están en manos del juez del Caso Taula. Barberá se inclina por el escrito y evita así una más que incómoda visita a los juzgados.
En el documento, según el diario 'El País', la senadora confirma que donó 1.000 euros para financiar la campaña de elecciones municipales de 2015, aunque no recuerda cómo lo hizo. Barberá niega que a cambio de esa aportación recibiera dos billetes de 500 euros como parte de un supuesto blanqueo sobre el que ella mismo no tuvo reparos en ironizar.
En el escrito repite los argumentos de sus dos últimas comparecencias públicas: que no hubo amaño alguno en las adjudicaciones públicas. O que lo suyo nada tenía que ver con la financiación de la campaña. Es más, la exalcaldesa apunta a su exmano derecha, Alfonso Grau.
Acusarla ahora de blanqueo, argumenta podría ser una venganza por haber dejado fuera de las listas electorales a su esposa, investigada en varios delitos del caso Taula. Según fuentes del PP, el instructor del expediente informativo abierto a la senadora hablará en los próximos días con ella para que dé explicaciones en el partido.