Rubiales, en el banquillo
Rubiales insiste en que Jenni Hermoso le dio su consentimiento y se justifica: "Me he comido a besos a muchos futbolistas"
Su declaración El expresidente de la RFEF ha asegurado estar "totalmente seguro" de que Jenni Hermoso le dio su permiso para que le diera un "besito" en los labios. No obstante, ni siquiera el perito de la defensa ha podido certificar la respuesta de la jugadora.
![Declaración de Luis Rubiales ante el juez Declaración de Luis Rubiales ante el juez](https://fotografias.lasexta.com/clipping/cmsimages01/2025/02/11/07F89D81-89A9-40CB-8BEC-2ED4AE82DD91/declaracion-luis-rubiales-juez_160.jpg?crop=1920,1080,x0,y0&width=544&height=306&optimize=low&format=webply)
"Me he comido a besos a muchos futbolistas". Así justifica Rubiales su beso no consentido a Jenni Hermoso. El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha asegurado este martes estar "totalmente seguro" de que la jugadora le dio su consentimiento para que le diera el "besito" en los labios tras ganar el Mundial de 2023.
Desde el primer minuto Rubiales ha defendido su versión de los hechos tratando, sobre todo, de justificar sus actos. "Ya habían pasado los árbitros, le tocaba a las jugadoras. Jenni cuando se acercó a mi, me puso una cara, nos conocemos de hace muchos años. Había fallado un penalti. Le dije olvida el penalti, somos campeonas. Ella me apretó muy fuerte debajo de las axilas y me levanto y al bajarme le pregunto si le puedo dar un besito y me dijo vale", ha explicado el expresidente de la RFEF.
Cuando terminaron de darse el abrazo en el aire, ha continuado, al ir a "besarnos" tras darle "permiso", la agarró la cabeza. Acto seguido, Rubiales ha insistido durante la declaración en que la pregunta, la respuesta y el beso fueron "simultáneos" y que estuvo "totalmente seguro" de haber obtenido el "consentimiento" de la jugadora.
"No doy picos todos los días a mis hijas, pero en Nochevieja se los doy"
¿Fue Jenni Hermoso la que levantó a Rubiales? Para él sí y trata de defenderse alegando que no flexiono en ningún momento las rodillas y que si no lo hace no podría saltar, "es una ley física". Y otro detalle clave: Rubiales ha pasado de asegurar que le dijo "un piquito" a "un besito". ¿El motivo? El perito en lectura de labios encargado por Luis Rubiales ha afirmado que el expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) preguntó a Jenni Hermoso si podía darle "un besito" tras la final del Mundial de 2023 y no "un piquito". De hecho, el mismo Rubiales ha apuntado que ambas palabras "son sinónimos".
Y sobre si acostumbra a darse besos con sus allegados y amigos, el expresidente ha manifestado lo siguiente: "No se gana un Mundial todos los días por lo que es difícil hablar de normalidad en esa circunstancia así". No solo eso, sino que ha llegado a decir que "tampoco doy picos todos los días a mis hijas, pero en Nochevieja se los doy".
Además, ha aseverado que había cinco jugadoras con las que tenía relación y que si hubiera sido otra jugadora "con la que tengo esa buena relación" le habría dado el mismo beso que a Jenni Hermoso. Para terminar sus justificaciones, ha afirmado que "yo me comía a besos a un montón de futbolistas".
El beso "no tiene nada que ver" con el protocolo
La fiscal de la Audiencia Nacional Marta Durántez le ha preguntado sobre el momento en el que piden a Jenni Hermoso que salga del vestuario tras el beso y por qué insistieron en que saliera la jugadora en vez de entrar al vestuario con el resto de compañeras. En este caso, Rubiales ha justificado su decisión diciendo que "lo que había acontecido no tenía ninguna importancia ni para ella ni para mi".
"Yo llamé a Jenni porque ella sabía que íbamos a ir a Ibiza y quería comunicarlo junto a ella. No la llamé para hablar del beso. Había una cámara de FIFA a cinco metros", ha asegurado. En cuanto al protocolo relacionado con la violencia física y el punto exacto en el que se prohíbe un beso forzoso o actos sexuales no consentidos, Rubiales ha alegado que "no tiene nada que ver" con lo que pasó con Jenni Hermoso.
Después de recordarle que existía un protocolo del Consejo Superior de Deportes contra la violencia de género, Rubiales ha aceptado que se equivocó al propinarle el beso. "Yo me equivoqué, porque yo estoy en una posición como presidente de la Real Federación Española de Fútbol, y metí la pata".
"A estas alturas, es una obviedad que desde el primer momento reconocí que me había equivocado, yo me comporté como un deportista que consigue un éxito como uno más del grupo, y en ese momento tenía que haber tenido la sangre más fría y haber estado en un papel más institucional, pero de ahí a que haya un delito, como usted dice, eso para nada", ha añadido.