Ruz reclama los ordenadores de Bárcenas, que atesora el PP en su sede de la calle Génova, para cotejar el pendrive entregado por el extesorero y los documentos de la supuesta contabilidad B del partido que se encuentren en el disco duro de estos ordenadores.

El juez del caso Gürtel requiere al PP que, en cinco días, le mande los dos ordenadores del despacho de Bárcenas en Génova. Cospedal aseguró el pasado miércoles durante su declaración como testigo que estos ordenadores "continúan custodiados" por la formación política.

Bárcenas se enfadó mucho cuando no le dejaron recuperar estos dos equipos y prueba de ello es el mensaje que le dejó a Mariano Rajoy, publicado por el diario El Mundo, donde le recriminaba el trato que les habían dado en la sede del PP a las personas que fueron a recoger sus pertenencias.

“Mariano, vergonzoso el comportamiento esta tarde de los abogados del partido. No han permitido que las personas que he enviado verifiquen el contenido de las cajas que había en el despacho que tú me autorizaste” “Tú sabrás a qué estáis jugando, pero quedo liberado de todo compromiso contigo y con el partido”.

Ruz acepta la práctica de esta diligencia pedida por el abogado de Luis Bárcenas, Javier Gómez de Liaño, con el fin de hacer una prueba pericial y que se cotejen los archivos contenidos en los ordenadores con los que Bárcenas aportó al juez el pasado 15 de julio en una memoria USB, que contenía los correspondientes a la supuesta contabilidad B del partido.

Según el juez, en dichos ordenadores estarían los "archivos primigenios" de los entregados por el extesorero en el lápiz de memoria.

El pasado 1 de marzo, Bárcenas acudió a la comisaría de policía del barrio madrileño de Salamanca para presentar una denuncia contra el PP, y en concreto contra Alberto Durán, por entrar sin permiso en el despacho que dijo que ocupaba en la sede nacional del partido, de dónde, aseguró, le habían "robado" dos ordenadores que tenía allí.

Una juez de Madrid archivó el 3 de mayo la denuncia al entender que, en contra de lo afirmado por Bárcenas, ni se produjo "robo con fuerza, ni hurto, ni apropiación indebida".

Antes de adoptar esta decisión, la juez interrogó a Bárcenas y a Durán, y el extesorero aseguró que no sólo forzaron la cerradura de su despacho, sino que la quitaron y destacó que "la única llave" del despacho la tenía él.