Durante su participación en el Retiro de líderes, el jefe del Ejecutivo español ha reivindicado el papel "fundamental" del G20 para la gobernanza global y en particular en la coordinación para "prevenir y responder a crisis financieras y económicas".
Además, ha defendido ante los líderes mundiales la necesidad de reforzar el sistema multilateral, basado en normas internacionales como forma de gobernar la globalización, con capacidad de enfrentar de forma colectiva los grandes desafíos mundiales, como el cambio climático, el reto migratorio, la desigualdad, y los cambios tecnológicos.
En cuanto a su intervención en la primera sesión plenaria, Sánchez ha reclamado una mayor ambición con las políticas de igualdad de género por ser estas "el instrumento más poderoso para generar crecimiento y oportunidades".
"El empoderamiento económico, político y social de las mujeres no es solo una cuestión de justicia para con el 50% de la humanidad, es también una fuente de crecimiento económico y de prosperidad", ha dicho Sánchez, que ha animado al resto de dirigentes a trabajar juntos para hacer de esta lucha el eje central de la agenda del G20.
Tras felicitar a Argentina por incluir por primera vez en el debate la cuestión del futuro del trabajo, el presidente español ha reivindicado la necesidad de trabajar por un empleo "incluyente, equitativo y sostenible" para "recuperar la confianza de los ciudadanos y disipar la ansiedad que los cambios provocan".
En una segunda sesión de trabajo, dirigida a construir consensos sobre comercio, fiscalidad y arquitectura financiera internacional, el jefe del Ejecutivo ha trasladado su apoyo a la reforma y modernización de la Organización Mundial del Comercio, ampliamente respaldada por el resto de líderes, y ha destacado la necesidad de fortalecer el Sistema Financiero Internacional "para construir una red de seguridad global que haga frente a posibles nuevas crisis".
"Necesitamos un FMI adecuadamente financiado, que se configure como un pilar fundamental para asegurar la estabilidad financiera, económica y social de nuestros países", ha subrayado.
En cuanto a la fiscalidad, el presidente ha marcado como objetivos prioritarios el desarrollo de un sistema impositivo "justo, moderno y eficiente", y la lucha contra la evasión fiscal. En particular, ha puesto en valor la labor de España, como "uno de los países que ha tomado medidas en el ámbito de la fiscalidad digital".
Por último, ha reclamado un marco regulatorio y de supervisión a nivel global sobre criptoactivos, con el objetivo de proteger a los consumidores e inversores, fomentar la integridad del mercado, la ciberseguridad y la privacidad, así como de luchar contra el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo.
En cuanto a la cuestión migratoria, una prioridad para el Gobierno español, Sánchez ha enfatizado que se trata de un fenómeno complejo que solo podrá gestionarse desde la cooperación internacional, mediante la gestión integral del reto migratorio.
El presidente ha aprovechado los encuentros para reiterar el apoyo del Gobierno español al Pacto Mundial para la Migración Segura, Ordenada y Regular impulsado por Naciones Unidas y cuya adopción tendrá lugar en la próxima Conferencia Intergubernamental en Marrakech, a la que Sánchez asistirá, los días 10 y 11 de diciembre.