¿En qué lugar deja esto al ministro?
Sánchez desautoriza a Marlaska para salir de la mayor crisis del Gobierno de coalición
Mientras tanto Desde el Ministerio del Interior optan por no comentar la decisión de Moncloa, aunque defienden que desde la cartera ya se había mostrado su voluntad de rescindir el contrato. Tarea en la que sostienen que llegaron a donde pudieron.

Resumen IA supervisado
El Gobierno de España ha cancelado un contrato de munición con una empresa israelí, desautorizando al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, en medio de una crisis en la coalición de izquierdas. Esta decisión, impulsada por la presión de Sumar e Izquierda Unida, busca evitar la compra de balas a una empresa cercana al gobierno de Netanyahu. El presidente Sánchez había afirmado previamente que España no comerciaba armas con Israel desde octubre de 2023, lo cual resultó ser incorrecto. Yolanda Díaz, vicepresidenta de Sumar, negoció personalmente la rescisión del contrato, destacando su compromiso con los derechos humanos. IU, por su parte, exige responsabilidades a Marlaska, considerando su gestión como una deslealtad.
* Resumen supervisado por periodistas.
El Gobierno de España ha rectificado. Algo que hace unas horas parecía imposible, este jueves se ha convertido en realidad, pues el mismo contrato de munición con una empresa israelí que no se podía rescindir, ahora ya lo está, o al menos, la orden ya ha sido emitida. Este ha sido el modo en el que el presidente del Ejecutivo ha desautorizado a su ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. Todo para salir de la mayor crisis de la coalición de izquierdas desde su nacimiento.
Está claro que España no recibirá las balas a esa empresa tan cercana al Gobierno de Benjamín Netanyahu, sin embargo, surge un interrogante: ¿En qué lugar deja esto a Marlaska? Sobre estas líneas, la última imagen del socialista en la que aparece muy cerquita del también secretario general del PSOE y la vicepresidenta de Sumar, Yolanda Díaz.
En definitiva, los protagonistas de la crisis de las últimas horas reunidos en Zarzuela en el marco de la reunión del Consejo de Seguridad Nacional que se ha celebrado este jueves y que ha presidido el rey Felipe VI. Un encuentro que podría calificarse como el broche a otra crisis en el Consejo de Ministros, o no, ante la posibilidad de que se traslade a Ferraz, ya que en Moncloa no están satisfechos con Marlaska.
Una hemeroteca complicada
Todo porque su gestión ha provocado que el presidente Sánchez dijera algo que no era cierto porque su Gobierno estaba incumpliendo esa orden de contratar con Israel. Prueba de ello, es que Sánchez aseguraba hace tan solo dos semanas desde la tribuna del Congreso de los Diputados dirigiéndose a las señorías, así como "lógicamente, al conjunto de la ciudadanía" que "desde el 7 de octubre [de 2023] España no desarrolla ninguna compraventa de armas con Israel". Incluso, llegó a reiterar ese adjetivo hasta en dos ocasiones.
Por su parte, desde la cartera que dirige Grande-Marlaska optan por no comentar la decisión de Moncloa, aunque defienden que Interior ya había mostrado su voluntad de rescindir el contrato. Tarea en la que sostienen llegaron a donde pudieron bajo los criterios de la Abogacía del Estado. Ahora, según insisten, con la directriz de Presidencia ya no es una vía que dependa del Ministerio.
Sumar salva su relación con IU y el PSOE
Un cisma en el que Sumar ha logrado sofocar dos incendios. Por un lado, bajo su propio paraguas en Izquierda Unida, mientras que, por otro, con su socio de Gobierno, el PSOE. Una crisis que, en cambio, Díaz no dudaba en negar, incluso, antes de que se cancelase el polémico contrato. Situación para la que ahora ya hay respuesta unánime, después de que haya asegurado que en la rescisión de la adjudicación estuvo trabajando desde este miércoles.
En concreto, la también ministra de Trabajo ha asegurado ante una serie de periodistas que esas negociaciones que llevó a cabo "personalmente" se mantuvieron tanto con Interior como con Presidencia. A renglón seguido, ha sacado pecho sosteniendo que gracias a estas conversaciones se ha "parado la formulación de un contrato que vulneraba la legalidad internacional en un gobierno" del que subraya "hace de la defensa de los derechos humanos su bandera".
Marlaska, que se lo haga mirar
Así las cosas, el contrato de compra a Israel de más de 15 millones de balas ya es historia, después de que lo haya roto de forma unilateral el Ejecutivo por orden del presidente del Gobierno, ante la presión de Sumar y las amenazas de IU, que amagaban con la dimisión de su única ministra, Sira Rego. Una decisión que, sin embargo, no exime de de que IU apunte a que es el momento de depurar responsabilidades, señalando directamente a Marlaska.
Una pretensión que ha compartido este mismo jueves en Al Rojo Vivo el coordinador general de la formación, Antonio Maíllo, tras señalar que ese contrato correspondía a "una deslealtad del Ministerio del Interior". Por eso, considera que es "obvio" que "cuando te rectifican [en referencia al ministro] tienes que hacértelo mirar". Asimismo, no ha dudado en celebrar la rescisión de la adjudicación después de que todos sus "esfuerzos" hayan estado "centrados en que se rectificara".