Sánchez certificó ese deseo en la reunión que mantuvo en un hotel de Montreal con los representantes de los españoles que viven en Canadá y a la que acudió acompañado de su esposa, Begoña Gómez.
En su reciente gira por varios países de Latinoamérica, el jefe del Ejecutivo trasladó en todas las reuniones con los residentes españoles que es necesario modificar ya ese voto rogado de quienes viven en el exterior debido a que su complejidad dificulta su participación en los procesos electorales.
Fue también el principal mensaje que lanzó a los españoles que viven en Canadá, a quienes aseguró que el Gobierno está hablando con todo los grupos parlamentarios del Congreso para pactar una reforma de la ley electoral que modifique ese voto. "Hay un consenso bastante amplio para poder modificarlo", informó al tiempo que confió en que sea posible hacerlo antes de las elecciones autonómicas, municipales y europeas de mayo.
El jefe del Ejecutivo lamentó también que desde hace 15 años ningún presidente español hubiera visitado Canadá y consideró trascendental que España retome la agenda exterior y haya más presencia de los miembros de su Gobierno en países como éste.
Asimismo, se refirió a la reunión que había mantenido horas antes con el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, con el que dijo que comparte agenda así como objetivos políticos, económicos y sociales.
La reunión con la colectividad fue el último acto de Sánchez durante su estancia en Montreal, desde donde mañana viajará a Nueva York para participar en diversos actos organizados con motivo del inicio del nuevo periodo de sesiones de la Asamblea General de la ONU.
En la jornada de mañana y antes de asistir a la recepción ofrecida por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a los líderes presentes en la Asamblea de Naciones Unidas, se reunirá con el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, e intervendrá en un acto sobre violencia contra mujeres y jóvenes con discapacidad.