El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha celebrado este jueves tres importantes reuniones en el Palacio de la Moncloa con los presidentes de Canarias, Aragón y Navarra, dentro de la ronda de contactos con los líderes autonómicos iniciada el pasado 20 de septiembre. En este contexto, Sánchez ha abordado asuntos urgentes que van desde la crisis migratoria en Canarias hasta las demandas de financiación de Aragón y la infraestructura ferroviaria en Navarra.
La primera reunión, celebrada a las 9:30 horas, fue con Fernando Clavijo, presidente de Canarias, quien centró su intervención en la grave crisis migratoria que afecta a las islas. Clavijo subrayó la necesidad de que el Gobierno central asuma una mayor responsabilidad en la acogida de menores migrantes no acompañados, una problemática que ha colapsado los recursos canarios.
Sánchez se comprometió a transferir antes de fin de mes los 50 millones de euros prometidos en agosto para paliar los costos de la gestión migratoria, pero Clavijo insistió en que la cantidad es insuficiente, reclamando 160 millones.
Además, el presidente canario demandó un "acuerdo de país" que garantice la redistribución equitativa de los menores migrantes entre las comunidades autónomas, advirtiendo que la presión migratoria, actualmente focalizada en Canarias y Ceuta, podría extenderse a otras regiones como Andalucía y Baleares.
86 millones de euros para el FITE
A continuación, Sánchez se reunió a las 11:00 horas con Jorge Azcón, presidente de Aragón, quien acudió con un documento detallado de 108 páginas y 44 propuestas consensuadas con los principales partidos políticos aragoneses. El presidente aragonés destacó la necesidad de avanzar en la financiación autonómica y criticó cualquier intento de favorecer a Cataluña en las negociaciones por votos separatistas.
En este sentido, Azcón exigió que se evite cualquier sistema de financiación "privilegiado" para una comunidad en detrimento de otras. Durante el encuentro, también se trataron temas de infraestructuras, como la mejora de autovías, ferrocarriles y la ampliación de embalses, proyectos que Aragón considera esenciales para su desarrollo económico.
Aunque Azcón se mostró escéptico ante la respuesta del Gobierno sobre las inversiones, logró asegurar el aumento del Fondo de Inversiones de Teruel (FITE) de 60 a 86 millones de euros, un logro que consideró crucial para el impulso de la provincia.
Chivite pide inversiones en infraestructuras
La jornada concluyó por la tarde con la llegada a las 16:00 horas de María Chivite, presidenta de Navarra, quien centró su encuentro con Sánchez en las "preocupaciones y necesidades" de su comunidad, destacando la urgencia de acelerar las obras del tren de alta velocidad. Chivite criticó la falta de atención de gobiernos anteriores en este aspecto, señalando que Navarra ha sufrido un importante retraso en infraestructuras clave.
Además, la presidenta navarra aprovechó para responder a las recientes acusaciones del Partido Popular sobre la normativa que supuestamente rebajaría las penas a los condenados por ETA. Chivite desmintió estas afirmaciones, asegurando que "no se están rebajando penas" y que el PP está usando este tema de "manera torticera" para desviar la atención de sus propias debilidades internas.
Hablar no solo de financiación
Aunque la ronda de reuniones se anunció después del acuerdo entre el PSC y ERC sobre la financiación para Cataluña y la reacción contraria por parte de otras autonomías, incluidas algunas del PSOE como Castilla-La Mancha, el Gobierno explicó que pretendía que en estos encuentros no se hable solo de financiación.
El objetivo, según indicó el Ejecutivo, es reforzar y fortalecer la colaboración entre el Estado y los gobiernos autonómicos, potenciar el diálogo e impulsar el entendimiento institucional entre las distintas administraciones. En este marco, los primeros en acudir a Moncloa fueron, el pasado 20 de septiembre, el lehendakari, Imanol Pradales (PNV), y los presidentes de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, y de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, ambos del PP.
La ronda continuó los dos viernes siguientes, primero con la presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga (PP), y los de La Rioja, Gonzalo Capellán (PP), y Asturias, Adrián Barbón (PSOE), y después con los jefes de gobierno de Murcia, Fernando López Miras (PP); Comunidad Valenciana, Carlos Mazón (PP); y Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page (PSOE).
De acuerdo al orden de aprobación de los estatutos de autonomía -que se viene siguiendo con la excepción de Cataluña-, para las próximas semanas quedarían los encuentros -no agendados de momento- con las presidentas de Extremadura, Baleares y Madrid, respectivamente María Guardiola, Marga Prohens e Isabel Díaz Ayuso, y con los presidentes de Castilla y León y de las ciudades de Ceuta y Melilla, Alfonso Fernández Mañueco, Juan Jesús Vivas y Juan José Imbroda, todos ellos del PP.