Las secciones sindicales de UGT, CCOO y USO habían marcado el 8 de enero como el "día clave" para el futuro de las plantas de Alcoa en Avilés y A Coruña. Por ello, han realizado una marcha a Madrid con concentración ante el Ministerio de Industria, donde se han producido momentos de tensión con la Policía después de que se cerraran las puertas del edificio.
A las 17.30 horas se celebrará una "reunión clave" en el Ministerio entre Gobierno, sindicatos y empresa. Restan 12 días para que la empresa Alcoa pueda comenzar a despedir a los 700 trabajadores de las plantas de Avilés y A Coruña, por lo que los sindicatos piden hechos a los gobiernos asturiano y central. "El objetivo no ha cambiado, y es mantener los puestos de trabajo. Por eso el Gobierno central debe dejar las palabras para pasar a los hechos, estamos en el tiempo de descuento, y con Alcoa o sin ella, la producción de aluminio se debe mantener la actividad en ambas plantas", ha advertido Jenaro Díaz.
En el comité de empresa los ánimos van decayendo, ante la falta de soluciones de por parte del gobierno central y regional. "Nos quedan doce días para ser despedidos. Alcoa es una multinacional trilera, y el gobierno debe poner un marco energético estable, porque sino nadie va a invertir y nos iremos a la calle", ha advertido Gómez de la Uz.
En caso de que la próxima semana no se ve a la luz al final del túnel, los trabajadores incrementarán la presión en sus protestas. "Ahora quemamos los neumáticos a la entrada de la empresa, como sigan sin dar soluciones ya veremos donde los quemamos", ha finalizado Damián Manzano.