Al menos 33 personas han resultado heridas leves por las cargas de los Mossos d'Esquadra frente a la Delegación del Gobierno en Cataluña, en Barcelona, y otras dos en Lleida, en las protestas por la detención del expresidente catalán Carles Puigdemont, según el Sistema de Emergencias Médicas (SEM).

Hasta el momento, han sido atendidas 33 personas por lesiones de carácter leve producidas durante los incidentes en las protestas en Barcelona, entre ellas tres mossos, y dos más han resultado heridas en Lleida.

Miembros del cuerpo de bomberos sofocan las llamas de los contenedores de basura

Los Mossos d'Esquadra han detenido a tres personas en los alrededores de la delegación del Gobierno en Cataluña, donde los antidisturbios han cargado y ha disparado salvas para evitar que algunos manifestantes, que les arrojaban objetos, rebasaran el cordón policial.

La concentración independentista que tiene lugar frente a la Delegación del Gobierno en Barcelona ha vivido momentos de tensión entre centenares de manifestantes que protestan por la detención en Alemania de Puigdemont y los agentes antidisturbios de los Mossos d'Esquadra que conforman el perímetro de seguridad.

Carles Puigdemont antes de pronunciar una conferencia en la Universidad de Helsinki

Algunos manifestantes han lanzando huevos, latas, algún bote de humo y pintura amarilla contra los agentes antidisturbios, que han efectuado algunas cargas y han disparado salvas para defender el perímetro de seguridad.

Además, un grupo de concentrados ha zarandeado un contenedor de basura y ha intentado arrojarlo hacia los Mossos, entre las protestas de la mayor parte de los independentistas que se manifiestan frente al cordón policial.

Recorrido de Carles Puigdemont antes de ser detenido

Los Mossos han efectuado entonces una carga de dispersión y han recuperado el contenedor. Varios centenares de personas convocadas por los autodenominados Comitès de Defensa de la República (CDR) se han concentrado ante la Delegación del Gobierno para protestar por la detención en Alemania del expresidente catalán Carles Puigdemont y el encarcelamiento de dirigentes independentistas por orden del Supremo. Los manifestantes lanzan consignas a favor de la huelga general y a favor de la libertad de "los presos políticos".